¿El municipio de Salta Capital hace política en una nube color fucsia?
Por: Lacolla Jackson
Un día antes del día del trabajador, Bettina Romero pagó los sueldos de la planta municipal, cuyos trabajadores permanentes, la mayoría, se quedaron en casa desde que arrancó la cuarentena obligatoria (una suerte de estado de sitio chinokernerista) que fue acompañada por el colorido y psicodélico gobierno de la ciudad.
El anuncio en tono picante de la intendenta molestó sobre manera a los barones de Gustavo, que salieron en manada a pedir explicaciones del milagro al entorno bettinista.
Parece que, (digo de pronto me parece), los denominados “recortes” que hizo Maléfica apenas iniciada la gestión permitieron ahorrar esos “gastos extras” de la política masculina; recortes que tanto le molestaron a los aliados del Frente que los impulsaron a instituir una suerte de bloque castigo en el Concejo Deliberante, comandado por el “un poco” perdido Dario Madile.
El mismo día que la jefa del gobierno capitalino viralizaba el anuncio picarón del pago a los municipales (que sorprendió hasta los gremios más duros) intendentes del área metropolitana advertían sobre la crisis en las arcas comunales al Ministro de Economía “el Loro” Dib Ashur.
15 intendentes salteñes pusieron sobre la mesa preocupaciones genuinas sobre los efectos del parate productivo y comercial en una provincia en la que hasta el momento se reportaron sólo 4 casos confirmados de infecciones por COVID19, municipios que se sostienen gracias a la pauta provincial.
El show de Gustavo y sus imágenes patronales perdió efecto en los jefes comunales del Foro de Intendentes. Mayo demanda otras propuestas comunicacionales, más alejada de la criminalización de la pobreza, física y discursivamente.
La novela apocalíptica de una pandemia china fue bien interpretada por Maléfica, a quién se le quiere poner el mote de tener pocas luces por su cara bonita, (machirulismo atr). Maléfica no paró de sacar medidas de la galera, las que deberá saber como mantenerlas a flote en el tiempo y cumplir los compromisos asumidos con los sectores afectados por las 7 semanas más intensas de lo que lleva este 2020. Todo esto dado en un contexto de desfinanciamiento del estado municipal votado por los aliados enojados del Frente (una suerte de muñecos pendiendo en la cuerda floja y bamboleándose al son de un equilibrista).
Mientras tanto abril, cerraba con fuego amigo. Aprovechando el intento de golpe mediático contra Alberto por la liberación de presos en cárceles federales, y el motín por la salud en las cárceles bonaerense, los “supon” de trolls locales armaron un audio viral sobre una supuesta Bettina “garantista”, que pedía desesperadamente que le envíen nombres de presos de Villa La Rosas para interceder por su libertad.
Les salió por la culata, o por lo menos confundió a la mentalidad dicotómicamente local que solo entiende modo derecha conservadora. El Gobierno Nacional y las organizaciones peronistas condenaron las acciones de infodemia sobre la amnistía presidencial, al momento en que las redes del gobierno de la ciudad desmentían dicho audio que ya empezaba a indignar al foro de abogados locales que lo comentaban. ¿Los indignaba el modo peronista municipal?
Los jóvenes expertos en marketing político y comunicacional posaron sus ojos sobre la intendenta y la están siguiendo de cerca.
Arranca el sexto mes de gestión para todos los gobiernos; no nos olvidemos que Maléfica tiene alas.