La Vicepresidenta se diferenció anoche de Javier Milei y defendió el aumento a los senadores, cuestionó el envío de las Fuerzas Armadas a Rosario, entre otras declaraciones al canal de noticias TN.
Victoria Villarruel se diferenció anoche de Javier Milei y defendió el aumento a los senadores, cuestionó el envío de las Fuerzas Armadas a Rosario, entre otras declaraciones al canal de noticias TN.
«Creo que tienen que ser retribuidos en forma digna. Tienen que ganar bien y actualmente no ganan bien. Cristina Kirchner, como pensionada, gana más de siete veces lo que gana un senador», dijo en su primera entrevista como vicepresidenta y detalló que un legislador gana menos de dos millones de pesos.
En esa línea, remarcó: «Si no reciben un sueldo digno para la importantísima tarea que le delegamos los argentinos, solo van a poder ser legisladores los ricos, los corruptos, los narcos o los que tengan sponsor atrás, el resto no va a llegar».
La Vicepresidenta se despegó del paquete de leyes que presentó el Gobierno por iniciativa de Patricia Bullrich y Luis Petri para que los militares intervengan en casos de seguridad interior, como el narcotráfico en Rosario.
Por otro lado, se manifestó en contra del anuncio que hizo ayer el ministro de Defensa, Luis Petri, respecto al proyecto que enviará con modificaciones en la ley de Seguridad Interior sobre el funcionamiento de las Fuerzas Armadas para los casos de terrorismo como ocurrió en Rosario durante las últimas semanas.
«No estoy de acuerdo. La función de las FFAA no es combatir a los civiles, creo que había quedado claro con el tema de los ’70. El narco, para el derecho, es un civil», apuntó y argumentó: «En los ’70 se combatió al terrorismo. ¿Dónde están los que los combatieron? Presos», concluyó durante una entrevista al programa de Jonatan Viale ¿La Ves?.
“Cristina Kirchner como pensionada gana más de 7 veces de lo que gana un senador, que gana menos de 2 millones. Que un jubilado gane lo que gane no me parece bien tampoco, no está bien nivelar para abajo. Subamos todo”, continuó.
Sobre su relación con Milei, la Vicepresidenta expresó: “Está bien. Somos dos personas que se complementan. Él es más vehemente en la vida pública y tranquilo en privado. Yo al revés, y nos complementamos. Creo que es lo que privilegió el pueblo argentino porque es algo muy completo. Hoy desayunamos. Me esperó con galletitas tipo exprés y le dije ‘qué bodrio’, dame una medialuna’. Me dijo ‘pedí lo que quieras’. Hay buena onda”. Y añadió: “Viste cómo es la susceptibilidad, no me sentí tocada después de la sesión del DNU. Estaba en juego la institucionalidad. Yo no puedo hacer lo que quiera, esto tiene que funcionar, se tienen que debatir las leyes. Yo soy un árbitro. El DNU ya tenía varios pedidos de muchos senadores para que se trataran. Puedo buscar el momento, pero no estar eternamente deteniéndolo”.
Sin embargo, confió en que el DNU continuará vigente: “No creo que se caiga, pero se va a dirimir en Diputados. Tenemos un plan B y C. Lo ha dicho el Presidente. Acá hay impulso de tratar las leyes. La ley de Bases se puede volver a mandar. El tiempo corre y tenemos necesidad de que se arbitren nuevas reglas porque la gente votó un cambio. Pero también está la institucionalidad y vamos a respetar las leyes. El Estado no se destruyó en dos minutos, no lo podemos reconstruir en dos minutos”.
Por otra parte, desestimó los rumores que circularon en torno a la posibilidad de que el titular del Ejecutivo otorgue indultos a exmilitares condenados por delitos de lesa humanidad y aseguró que “no hay una versión seria al respecto”.
“No me consta de que se hable seriamente, no me llegó eso. La solución a la cuestión que están detenidos es una solución jurídica, el Derecho no dice lo que se interpretó” y, frente a las marchas previstas para el domingo en conmemoración por el Día de la Memoria, contestó: “Estamos en un Estado democrático, si quieren festejar el golpe, allá ellos, claramente hay un morbo con eso”, indicó.
Sobre su posibilidad de manejar Defensa y Seguridad, que quedó truncada con la llegada de Bullrich y Petri, aseguró: “No me agradó, pero lo tengo que respetar”.
En cuanto a la mención del juez Lijo para ocupar un lugar en el máximo tribunal, mostró cierto rechazo y recordó que “no actuó bien en la causa Rucci”. “No me deslumbra. Esperaba que siendo la vacante de una mujer…”, sostuvo.