Se estima que los balnearios abrirán en diciembre. El protocolo de trabajo seguro para guardavidas en el marco de la pandemia prevé las formas de actuación durante la prevención, rescate y atención prehospitalaria, garantizando las medidas de bioseguridad necesarias para evitar contagios.
Desde la Asociación de Guardavidas y Rescate Salta presentaron semanas atrás un protocolo a la Municipalidad de Salta y a otras intendencias para que sea aprobado por el Comité Operativo de Emergencias (COE) y pueda implementarse cuando abran los natatorios.
El informe que entregaron a las comunas lleva adjunto el protocolo que se diseñó a nivel nacional y fue aprobado el 8 de septiembre último por el Ministerio de Salud de la Nación, en el marco de la pandemia de coronavirus.
Si bien aún no hay fecha para la apertura de los balnearios, se estima que abrirán en diciembre. La semana pasada, desde la Municipalidad abrieron la convocatoria para cubrir cargos de guardavidas en las piletas municipales y el examen será el domingo próximo.
Desde la asociación recordaron que sigue pendiente de aprobación en la Cámara de Senadores el proyecto de ley para que haya personal guardavidas capacitados en los espejos de agua habilitados de la provincia. Esta iniciativa que fue presentada por la diputada Isabel de Vita fue aprobada por unanimidad en Diputados. “Se hace necesaria su aprobación ante la inminente temporada estival para evitar decesos que todos los años se suman en nuestra provincia”, señalaron.
El protocolo de trabajo seguro para guardavidas en el marco de la pandemia prevé las formas de actuación durante la prevención, rescate y atención prehospitalaria, entre otras actividades, garantizando las medidas de bioseguridad necesarias para evitar contagios. Fue elaborado por el Sindicato Único de Guardavidas Y Afines de la República Argentina (Sugara) y la Federación Argentina de Salvamento Acuático (FASA).
Se busca que haya el menor contacto físico posible entre el personal guardavidas y el público, para lo cual los profesionales deberán adaptar sus intervenciones habituales en las piletas de natación. Se trata de una medida excepcional que debe ser utilizada en el marco de la pandemia y mientras dure la emergencia sanitaria por COVID-19.
El presidente de la asociación, Raúl Sánchez Bustamante, explicó que con este protocolo buscan garantizar el cuidado no solo de las personas que asisten a los natatorios sino también del personal guardavidas.
«Una ley que fomenta la vida»
Sánchez Bustamante consideró que es “grave e importante” que la Cámara de Senadores apruebe el proyecto de ley para que haya guardavidas capacitados en los espejos de agua habilitados de la provincia.
“No entendemos por qué se demora… Fue aprobada por unanimidad en Diputados y quedó trabada en Senadores. Es una ley simple que fomenta la vida”, advirtió Sánchez Bustamante.
El hombre evaluó que desde la Provincia y los municipios deberían habilitar más natatorios para la población o empezar a crear costaneras seguras, como hacen otras provincias. Evaluó que esto favorecería microemprendimientos para mucha gente.
Durante los meses de calor, muchas personas acuden a las costaneras de los ríos, con los riesgos que esto implica. “Todos los años hay una gran cantidad de muertes en las inmediaciones de los ríos”, señaló Sánchez Bustamante y mencionó que enero suele ser el mes más fatídico.
Lamentó que los vecinos del barrio Ceferino, en las cercanías del Arenales, dicen que “todos los años el río se les lleva un hijo”. “Es como si estuviera predestinado”, cuestionó Sánchez Bustamente y advirtió que no hay señalización en la zona.