El femicida de Ludmila se ocultó en unos pastizales y luego en el agua del arroyo hasta que finalmente no resistió las bajas temperaturas y, al regresar a la superficie se entregó el detenido.
El joven de 19 años que era buscado por el femicidio de Ludmila Pretti, la chica de 14 años asesinada el domingo último en una casa a la que había ido a una reunión con amigos, en la localidad bonaerense de Francisco Álvarez, partido de Moreno, fue detenido ayer durante un rastrillaje realizado en unos pastizales y un arroyo de esa misma localidad, informaron fuentes judiciales y policiales.
Se trata de Cristian Adrián Jerez, quien fue capturado cerca de las 2 de esta madrugada, luego de que los investigadores detectaran actividad de su teléfono y un testigo alertara al 911 sobre su presencia en inmediaciones de las calles Arístides y Diario La Nación, de esa localidad de la zona oeste del conurbano.
El arresto fue confirmado ayer en la mañana por el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, quien en una conferencia de prensa que brindó en Puente 12, partido de La Matanza, para hablar de la situación de la policía provincial tras la protesta realizada ayer por aumento salarial, destacó que en este caso los efectivos siguieron trabajaron para poder localizarlo.
«Muchos de los policías siguieron trabajando, la gran mayoría. De hecho ayer, entre las once y las doce de la noche, detuvimos al que está sindicado como el asesino de Ludmila», expresó el ministro, quien destacó que «la gran mayoría de los casos son resueltos en 24 o 48 horas».
Voceros judiciales y policiales detallaron que la búsqueda de Jerez comenzó el domingo y se desplegó durante toda la jornada de ayer, y que estuvo a cargo de efectivos de la DDI de Moreno, de la División Búsqueda de Prófugos y Personas Desaparecidas de Policía Federal Argentina (PFA) y de la Brigada K9 de la División Canes.
La zona de búsqueda inicial había sido delimitada luego de que se detectara mediante una triangulación de señales de antenas actividad en el teléfono del sospechoso, quien había cambiado su chip y tenía otra línea telefónica.
El perímetro de rastrillaje se acotó cuando anoche, cerca de las 21, una persona llamó al 911 para decir que había visto al joven buscado caminar cerca de un campo que va hacia un arroyo del río Reconquista, por lo que se saturó la zona de efectivos.
El prófugo se ocultó en unos pastizales y luego en el agua del arroyo hasta que finalmente no resistió las bajas temperaturas y el acecho de los perros entrenados en la orilla y, al regresar a la superficie se entregó detenido, añadieron los voceros.
El fiscal 4 de Moreno-General Rodríguez, Federico Soñora, tiene previsto indagar al detenido pasado el mediodía por el delito de femicidio.
En tanto, los restos de Ludmila eran velados ayer en la mañana en la sala de Moreno y, según adelantó su padre, Leandro Pretti, fueron inhumados horas más tarde en el cementerio municipal.
«Agradezco a todas las fuerzas de seguridad que ayudaron a detener al asesino. Queremos despedir a mi hija en tranquilidad», expresó el hombre en la puerta de la sala velatoria del Pueblo ubicada en Álvarez Jonte 1566, de Francisco Álvarez,
El cadáver de Ludmila fue hallado el domingo a la anoche, semidesnudo aparentemente abusada y entre dos colchones, en una vivienda ubicada en la calle Diario La Nación 4039, del barrio Villa Escobar, de Francisco Álvarez,
La autopsia confirmó que la adolescente murió por asfixia por estrangulamiento a lazo -aparentemente con la pashmina que llevaba puesta- y se aguardan estudios complementarios para saber si hubo o no un abuso sexual.
La joven había sido denunciada como desaparecida por su familia el domingo, cuando no regresó a su casa tras pasar la noche anterior con amigos en una reunión en una vivienda de la zona.
Según lo que pudieron reconstruir los investigadores, Ludmila había ido con un amigo y una amiga a la casa de Jerez, un primo de esta última, donde fue hallada luego asesinada.
El femicidio de la adolescente provocó la reacción de sus familiares, amigos y vecinos, quienes ayer marcharon hasta la puerta de la comisaría local para pedir justicia y la detención del culpable y provocaron algunos incidentes, por lo que la dependencia fue rodeada por la policía. El crimen quedó resuelto, aunque puede haber más responsables.