Modificaciones en relación a la información que deben requerir las instituciones financieras a no residentes, que fortalecerán el intercambio entre países que adhieren a la convención de la OCDE sobre asistencia fiscal.
La Administración Federal de Ingresos Públicos emitió una resolución por la cual fortaleció las herramientas de control y seguimiento sobre las cuentas financieras de argentinos alrededor del mundo.
El organismo que encabeza Mercedes Marcó del Pont introdujo, como parte de su estrategia de fiscalización, por medio de la Resolución General 4888, un conjunto de recomendaciones internacionales a la normativa vigente en referencia a la información que deben requerir las instituciones financieras a no residentes.
Esa información es la que luego podrá recibir el país al que pertenecen lo sujetos no residentes, de modo de que se pueda fiscalizar la correcta declaración de los activos que posee en el exterior.
Las nuevas normas introducidas por la resolución están contempladas bajo el Estándar Común de Reporte que corrdina la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), bajo los parámetros de la Convención sobre asistencia administrativa mutua en materia fiscal.
La resolución 4888 dada a conocer este miércoles, introduce cambios a la RG 4056 y sus modificatorias, por la cual se estableció un régimen de información anual que deben cumplir determinadas instituciones financieras respecto de las cuentas consideradas declarables, cuyos titulares sean sujetos no residentes. Las modificaciones introducidas mejoran la calidad de la información sobre los sujetos no residentes que Argentina comparte con el resto del mundo.
La adopción de las recomendaciones realizadas por el Foro Global de la OCDE garantizan la reciprocidad con más de 80 países que remiten datos de cuentas financieras a la AFIP. Los cambios facilitarán las tareas de fiscalización internacional del organismo, explicó el organismo fiscal al dar a conocer las novedades al respecto.
Argentina comenzó a recibir la información financiera prevista en el Estándar Común de Reporte de la OCDE en 2017. Los datos recibidos anualmente incluyen los saldos, intereses, dividendos y productos de las ventas de activos financieros, informados a los gobiernos por las instituciones financieras, que cubren las cuentas de personas y entidades.