Santa Fe: El sujeto de 20 años está detenido con prisión preventiva.
Un joven de 22 años de la ciudad de Santa Fe fue imputado con prisión preventiva por haber intentado matar a una trabajadora sexual con la que había acordado un encuentro, informaron fuentes judiciales.
Trascendió que el sujeto, lejos de abonarle los servicios, durante el acto sexual la asfixió con precintos hasta casi quitarle la vida.
El hecho ocurrió en un hotel ubicado en la zona de la terminal de ómnibus de la capital de esta provincia el último miércoles por la noche.
Hasta ahora no se pudo establecer cuál fue el disparador de la violencia del joven hacia la trabajadora sexual, a la que ni siquiera le había pagado lo acordado.
Las fiscales Cristina Ferraro y Jorgelina Mosser Ferro acusaron al joven, identificado por sus siglas como M.E.L, de intentar matar a la mujer mediante asfixia con precintos plásticos y luego con sus manos, según detallo el Ministerio Público de la Acusación (MPA) a la prensa.
«El imputado acordó con la víctima pagarle dinero a cambio de tener relaciones sexuales y fueron a un hotel ubicado en la zona de la terminal de ómnibus de la ciudad de Santa Fe«, explicaron las fiscales.
Ferraro y Mosser Ferro detallaron que, «de acuerdo a lo denunciado por la víctima, el hombre comenzó a asfixiarla con un precinto de plástico y luego siguió haciéndolo con las manos».
Según explicaron, como consecuencia de los forcejeos los dos cayeron de la cama en la que estaban al piso «y el imputado golpeó a la mujer, mientras continuaba asfixiándola».
Las acusadoras plantearon en la audiencia imputativa que «el hombre investigado actuó con conocimiento de lo que hacía, y asumiendo y aceptando como posible el resultado muerte de la mujer».
Por eso, solicitaron que sea imputado por la figura de tentativa de homicidio calificado por haber sido cometido por un hombre contra una mujer mediando violencia de género, es decir, femicidio.
Las fiscales precisaron que «el ataque fue producido en un contexto de violencia de género no íntimo, a raíz de que no había una relación previa entre ambos».
«No obstante -abundaron- estuvo caracterizado por el abuso físico y la vulnerabilidad de una trabajadora sexual que estaba sola, en horas de la noche, y sin posibilidad de defenderse del ataque de un extraño».
El juez penal de la audiencia, Leandro Lazzarini, aceptó la imputación y dictó prisión preventiva sin plazo para el acusado, al entender que existe riesgo de fuga o de entorpecimiento de la investigación, detallaron los voceros.