Luego de ser asaltada, la mujer de 50 años falleció de un paro cardíaco en su domicilio, su cadáver fue mordido por sus cinco perros, lo que en principio dificultó determinar las causas de su muerte.
La mujer de 50 años que fue encontrada muerta y devorada por sus perros en su casa de la localidad bonaerense de Villa Rosa, partido de Pilar, donde se comprobó que la asaltaron, falleció como consecuencia de un paro cardiorrespiratorio, según reveló la autopsia, informaron ayer fuentes judiciales. Un hecho que estremeció a los vecinos de ese lugar y localidades lindantes por el macabro hallazgo.
Se trata de Antonia García Núñez (50), quien llevaba al menos dos días fallecida al momento de ser encontrada el martes pasado y parte de su cadáver fue mordido por sus cinco perros, lo que en principio dificultó determinar las causas de su muerte.
Voceros judiciales informaron que el fiscal Germán Camafreita, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 descentralizada de Pilar, recibió en las últimas horas el informe preliminar de la autopsia, en el cual se estableció que la mujer sufrió una muerte no traumática por infarto de miocardio y se fijó una data de muerte de 24 a 36 horas aproximadamente.
De esta manera, los investigadores estiman que García Núñez falleció como consecuencia del susto o disgusto que le generó el asalto del que fue víctima.
En tanto, el fiscal Camafreita este lunes se reunirá con uno de los forenses para aclarar alguno de los puntos de la necropsia practicada al cuerpo de García Núñez, mientras avanza en distintas medidas tendientes a esclarecer el asalto, informaron fuentes judiciales.
El crimen
El hecho ocurrió en una casa situada en la calle Juan Domingo Perón al 1100, a metros de la ruta 25, donde la víctima fue hallada muerta por un familiar de García Núñez que fue a la vivienda preocupado porque hacía dos días que no se podían comunicar con ella.
La Policía acudió al lugar, y de acuerdo a las primeras apreciaciones, lograron constatar que se trató de un robo, ya que había faltantes y los ambientes de la casa estaban revueltos. «Faltaban televisores, dinero, un celular, una notebook y las llaves», precisó a Télam una fuente judicial. De la investigación participan detectives de la Subdelegación de Investigaciones (Sub DDI) de ese distrito.