Ya son 14 las personas que fallecieron en accidentes de tránsito ocurridos en rutas y calles de la provincia en lo que va de enero de este año, diez casos corresponden al interior y cuatro a capital.
Los siniestros viales se siguen cobrando vidas y ya son 14 las personas que fallecieron en accidentes de tránsito ocurridos en rutas y calles de la provincia en lo que va de enero de este año, diez casos corresponden al interior y cuatro a capital.
En el mismo mes de 2021 se registraron un total de 17 víctimas fatales. De esa cantidad, 15 fallecimientos corresponden a localidades del interior y dos a la capital salteña. Hasta el momento no hay grandes cambios, pero sí se nota que los accidentes son mucho más graves.
El año pasado cerró con un total de 164 víctimas fatales en accidentes de tránsito. Algunos fallecieron en el acto y otros en un lapso de entre uno y 30 días en los hospitales. La mayoría, unos 124, ocurrieron en el interior y 40 en la capital salteña.
Durante el 2021 se produjeron 3.836 siniestros que dejaron como consecuencia personas lesionadas: la mayor cantidad ocurrió en la capital salteña, unos 2.238 y el resto en municipios del interior: 1.598.
En lo que va de este mes hubo 93 accidentes con personas lesionadas en Salta capital y 98 en el interior. Las estadísticas fueron elaboradas por la Policía Científica y Técnica de la Provincia.
Lugares críticos
La jefa del área, Olga Cruz Paz, explicó que desde hace varios años realizan estudios de siniestralidad vial, lugares donde ocurren y factores confluyentes.
Explicó que la zona urbana, la capital salteña, tiene la mayor concentración de siniestros viales con personas lesionadas y que hay puntos críticos, es decir, lugares peligrosos y propensos a los accidentes. Estos son la avenida Paraguay, la Bélgica, la rotonda del mercado Cofruthos y la rotonda de Limache.
A esta última se refirió Cruz Paz. «La rotonda de Limache era un punto que había disminuido, calmado su siniestralidad tiempo atrás, pero ahora volvió».
Otros lugares riesgosos son la avenida Bolivia, en la zona norte de la capital salteña, y también las avenidas Pontussi y Martín Fierro, en la zona sudeste.
La fatalidad se adueña de las rutas. La nacional 9/34, precisamente en el kilómetro 1.535, Metán y la zona de Rosario de La Frontera, se ha cobrado muchas vidas.
«En uno de los últimos siniestros sobre la ruta 9/34, en Gral. Gemes, tuvimos que lamentar la pérdida de nuestro compañero, el comisario Pablo Costilla«, expresó la comisario.
Y añadió «teniendo en cuenta las características del siniestro, hay que analizarlo. Nosotros ya habíamos detectado que ese lugar es conflictivo. Ya tiene varios hechos viales con lesionados y víctimas fatales».
El choque en el que murió Costilla ocurrió a las 3 del domingo, a la altura del ingreso al parque industrial de Güemes, cuando un automóvil marca Fiat Palio, con seis personas a bordo, intentó sobrepasar la marcha de un automóvil Volskwagen Gol donde viajaba la familia Costilla. En ese momento de frente apareció un Peugeot 307, y el conductor del Fiat Palio al intentar regresar a su carril colisionó con el Gol de la familia Costilla. La tragedia vial tuvo cinco muertes en total.
En las rutas nacionales y provinciales predomina la circulación de vehículos de mayor porte, como camiones y camionetas, por este motivo protagonizan la mayor cantidad de accidentes, según precisó.
Prevención
Son tres los factores que influyen para que se produzca un accidente de tránsito: el humano, el ambiental y el vehículo.
«Al analizar hechos específicos, determinamos que la conducta humana es la principal causante. En zonas urbanas la mayoría de los accidentes son protagonizados por motociclistas que, en muchos casos, no llevan casco. El alcohol y consumo de sustancias del conductor y el mal uso de la tecnología, puesto que muchos conductores utilizan su celular, son las principales problemáticas», dijo Cruz Paz.
La velocidad alta es otro detonante. «En muchos casos vemos la planimetría de un accidente y la huella de frenada es de 20 metros, lo que indica que el vehículo iba a una velocidad muy superior a la permitida. Hay que respetar señales, semáforos, ceder el paso cuando corresponde y utilizar el cinturón de seguridad», aseveró.
«Fomentar la educación vial en todos los niveles educativos es fundamental para la prevención», considera Cruz Paz.
«Hay que tomar conciencia al momento de manejar un vehículo y salir a las calles, y más que nada ahora que estamos en época de vacaciones y mucha gente no conoce las rutas ni los horarios pico», finalizó.
En estado de ebriedad
Cada fin de semana la Policía Vial detecta entre 150 y 200 ebrios al volante. En los controles el índice de alcoholemia positiva oscila entre el 2 y el 3,5%
Los controles vehiculares que la Policía Vial realiza en rutas, accesos, arterias urbanas y zonas recreativas de la capital y el interior exponen una preocupante falta de conciencia.
El alcohol es un tóxico depresor del sistema nervioso.
Un solo vaso de vino, cerveza, whisky, etc., disminuye la capacidad de conducción, ya que embota los sentidos, altera la percepción y atención.