Máscaras de gomas, caretas de plástico y las más variadas vestimentas de los personajes de terror “coparon” las vidrieras de las principales casas de cotillón y disfraces.
El calor no fue motivo para que en la mañana de hoy los salteños recorran los principales locales comerciales en busca de un disfraz para “La Noche de Halloween”, que se celebra el próximo 31 de octubre. Ya no es novedad que días previos a esta fecha los salteños recorran los comercios en busca del mejor disfraz.
Máscaras de gomas, caretas de plástico y las más variadas vestimentas de los personajes de terror “coparon” las vidrieras de las principales casas de cotillón y disfraces.
Caretas que arrancan en los 350 o 400 pesos hasta disfraces completos que superan ampliamente esta cifra.
El origen de Halloween
Hay que ir por partes. En primer lugar, la palabra ‘Halloween‘ tiene origen en Escocia: proviene de ‘All Hallow’s Eve‘, lo que en castellano quiere decir ‘Víspera de todos los Santos‘, y se remonta muy atrás en el tiempo, al Siglo XVI. Ahora masiva, Halloween empezó siendo una celebración pagana con raíces en el ‘Samhain‘, un antiguo festival celta que se realizaba en Irlanda cuando la temporada de cosechas se terminaba. Esto también daba inicio al Año Nuevo celta. Ellos creían que en esta época los espíritus (tanto benévolos como malévolos) podían caminar entre los vivos, de ahí la necesidad de disfrazarse para ahuyentar a aquellos que quisieran hacerles daño. Más tarde en el tiempo, en 1840, Halloween llegó a Estados Unidos a través de los inmigrantes irlandeses, y poco a poco fue transformándose en una de las festividades más populares del país del norte, una que comenzó a arraigarse cada vez más.
Allí es común que se realicen desfiles multitudinarios, que hasta incluyen carrozas de gran tamaño. ¿El primero de todos ellos? Fue en Minnesota, en 1921.
Por qué se se usan calabazas en Halloween
La calabaza iluminada desde su interior con una vela y con una cara tallada es el símbolo más popular de Halloween. Esto tiene que ver con una vieja leyenda celta que habla de Jack, un irlandés con fama de tacaño que logró engañar al mismísimo Diablo para que no reclamara su alma y así terminar en el Infierno.
Sin embargo, cuando murió tampoco pudo entrar en el cielo, por lo que terminó deambulando entre los dos reinos con una improvisada linterna hecha con velas y nabos.
Con el tiempo, la calabaza reemplazó a aquella otra hortaliza y se convirtió en la nueva forma de alumbrar el camino en Halloween.
Truco o trato
Otra de las costumbres de Halloween es el famoso ‘Truco o trato‘, en donde los niños se pasean disfrazados por las calles pidiendo golosinas o, en caso contrario, realizando alguna broma. Su origen también se relaciona con el tristemente célebre Jack: la leyenda celta afirmaba que su espíritu iba de casa en casa pidiendo ‘truco o trato‘, y que lo más conveniente era pactar con él para que no le realizara una maldición al hogar.