Sostienen que no hay pruebas suficientes para que Damián y Guillermo sigan detenidos.
La defensa de los hermanos Javier, Guillermo y Damián Saavedra, acusados por el asesinato de Jimena Salas, ocurrido en 2017, interpusieron un recurso de apelación en donde solicitan el sobreseimiento de dos de los detenidos: Guillermo y Damián, y en su defecto la inmediata morigeración de su condición procesal. Están detenidos desde septiembre del 2022.
Justamente este pedido se conoció luego de que el viernes se informara que un juzgado de Garantía en feria confirmara la prisión preventiva de los tres hermanos Saavedra, quienes están acusados por el delito de homicidio calificado por alevosía, ensañamiento, criminis causa y por el concurso premeditado de dos o más personas y femicidio, cargos que tienen una expectativa de condena de la más gravosas del Código Penal vigente.
El viernes 27 de enero de 2017 Jimena Salas fue interceptada en su domicilio en Vaqueros y asesinada con más de 40 puñaladas.
En el escrito, que ya ingresó al Tribunal de Impugnación, a cargo del juez Eduardo Barrionuevo, los defensores Marcelo Eduardo Arancibia y su hijo Marcelo Eduardo hicieron un pormenorizado análisis del marco probatorio que la jueza de Garantía Nº 5 utilizó en su momento para dictar la prisión preventiva de Guillermo y Damián Saavedra.
«La jueza de Garantía en feria prorrogó la prisión preventiva sin siquiera verificar que las actuaciones posteriores al dictado de la misma habían desarticulado gran parte de la acusación, demostrando la defensa que las pruebas que sostienen la medida de prisión no tienen sustento en algunos casos», señalaron los defensores, y agregaron que «en otros demostraron que no se ajustan a la verdad extraída de los testigos, incluso aquellos de identidad reservada».
Los defensores también señalaron que «en el campo pericial y científico quedó demostrado que los automóviles de los acusados nunca estuvieron en el lugar de los hechos, que los ADN de nuestros defendidos no coinciden con las muestras tomadas el día del crimen, que nuestros defendidos jamás fueron detenidos o acusados de delitos contra la propiedad por ninguna Policía en la provincia».
Javier, el apuntado
A fines de octubre pasado el Ministerio Público Fiscal señaló que el cotejo del perfil genético de Javier Saavedra arrojó una coincidencia perfecta con 14 muestras tomadas en la escena del crimen, entre ellos en el hombro de la remera de una de las hijas de la víctima, como así también en un acolchado. La defensa señala que si bien su ADN apareció en la escena del crimen, junto a otro supuestamente familiar en el grado de parentesco de medio hermano o primo hermano, las muestras tomadas a sus otros dos hermanos detenidos junto a 14 primos hermanos dieron negativo , lo que amerita una nueva pericia y la contraprueba que aún no se realizó.