La marcha para presionar al Gobierno por la movilidad jubilatoria inició pasadas las 15 en medio de tensión con las fuerzas de seguridad. Cómo impacta el veto presidencial en los jubilados.
Este miércoles, agrupaciones de jubilados junto a organizaciones sociales salieron a la calle para expresar su rechazo al veto presidencial de Javier Milei a la ley de movilidad jubilatoria recientemente sancionada por el Congreso.
Los manifestantes se reunieron a partir de las 15 horas en las cercanías del Congreso de la Nación. Desde allí, iniciaron la marcha hacia Plaza de Mayo, en una manifestación donde volvieron a desafiar el protocolo de control de protestas establecido por el Ministerio de Seguridad, liderado por Patricia Bullrich.
La convocatoria, que busca presionar al Poder Ejecutivo para revertir la medida, se produce tras incidentes la semana pasada, cuando grupos de jubilados intentaron cortar la avenida Rivadavia a la altura del Congreso y fueron reprimidos por la policía federal. Este miércoles no fue la excepción, luego de que se registraran incidentes en las inmediaciones del palacio legislativo entre fuerzas federales y manifestantes.
Incidentes frente al Congreso
La marcha de jubilados y organizaciones de izquierda frente al Congreso vivió momentos de tensión cuando, tras varios minutos de enfrentamiento verbal entre los manifestantes y la Prefectura Nacional, comenzaron los primeros incidentes en medio de la aplicación del protocolo antipiquetes.
La confrontación se produjo en la esquina de Combate de los Pozos y Rivadavia, frente al anexo de la Cámara de Diputados, donde se produjeron empujones y corridas mientras los manifestantes intentaban evitar que se cortara la calle. La situación se tornó caótica por unos momentos, con las fuerzas de seguridad tratando de controlar el desorden.
Detalles de la marcha contra el veto presidencial
Además de varias agrupaciones de jubilados, la manifestación contó con la participación de organizaciones como Polo Obrero, el MST (Movimiento Socialista de los Trabajadores), el Movimiento Evita, el MST-Teresa Vive, el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), el Movimiento Evita, Barrios de Pie, la Corriente Clasista y Combativa (CCC), el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), así como varias agrupaciones de jubilados.
En estos días trabajaron en conjunto con colectivos de jubilados para coordinar la movilización. Cabe recordar que el 28 de agosto pasado ya hubo una protesta de jubilados en las puertas del Congreso, que terminó con la Policía reprimiendo a los jubilados y otros manifestantes con palos y gases lacrimógenos.
Esa actuación de las fuerzas de seguridad generó repudio de amplios sectores opositores como Unión por la Patria, el Frente de Izquierda e incluso algunos sectores del radicalismo.
Por su parte, la diputada nacional del Frente de Izquierda, Vanina Biasi, fue una de las voces más críticas del veto presidencial. «El gobierno no sólo vetó un aumento de miseria para los jubilados, cuyo poder adquisitivo está en un mínimo histórico», expresó en un comunicado.
«También encareció considerablemente los gastos en salud, motivo por el cual muchos ya no compran los medicamentos. Las nuevas restricciones impuestas para el acceso a la cobertura del 100% en medicamentos, sumado al recorte brutal que restringe el programa a solo 5 medicamentos por mes, es un ataque directo a la salud de las y los jubilados, que deberán incrementar el costo de sus cuidados de salud», continuó la legisladora, al anunciar su participación en la marcha.
El presidente Javier Milei vetó igualmente el aumento aprobado por el Congreso y aumentó el fuerte malestar entre los jubilados y las organizaciones sociales y políticas. La medida fue oficializada el lunes.
Impacto del veto en las jubilaciones mínimas
El veto presidencial revocó la decisión del Congreso de ajustar la jubilación mínima al valor de la canasta básica, que en julio alcanzó los $317.704,19. En contraste, el haber mínimo de ese mes fue de $285.581, incluyendo un bono de $70.000.
Ante el descontento generado por el veto, el Gobierno evalúa otorgar un bono adicional a los jubilados con haberes mínimos. Este bono podría ser de entre $10.000 y $20.000, sumándose al bono de $70.000 que lleva meses sin actualizarse pese a la inflación.
Los bloques opositores en el Congreso confían en poder ratificar la ley que fue vetada por el Presidente. Legisladores de Unión por la Patria, junto con otros partidos, esperan reunir los votos necesarios.