En los mayoristas, bancos y centros de pago la aglomeración de gente rompe con los protocolos.
En el arranque de la semana y pese a las recomendaciones del Gobierno nacional, de la provincia y de los organismos de salud internacionales, no se vislumbra aún una toma real de conciencia en Salta.
Los supermercados y mayoristas desde ayer permanecen colmados de clientes, lo que atenta contra toda medida de previsión tendiente a impedir la propagación del coronavirus.
A lo largo de la mañana de hoy, en el banco Santiago del Estero ubicado en calle España, entre Sarmiento y 25 de Mayo, en pleno centro, la fila de jubilados a la espera de cobrar sus haberes era de casi dos cuadras. Esto sumado que los adultos mayores, franja de riesgo, permanecieron allí bajo una copiosa llovizna. En los centros de pago y de servicios, se repetía idéntica postal.
Hay clubes sociales que aún siguen funcionando desoyendo las prohibiciones que hacen referencia a los riesgos que implica la aglomeración de gente.
Fuente: El Tribuno