El hecho ocurrió este martes por la tarde en la localidad de Parada Acuña, Corrientes. Las víctimas, Isondú Marisel Fernández, de 22 años, y su hermana menor, Aitana, de 9, fueron asesinadas de manera salvaje en su domicilio.
El hecho ocurrió este martes por la tarde en la localidad de Parada Acuña, Corrientes. Las víctimas, Isondú Marisel Fernández, de 22 años, y su hermana menor, Aitana, de 9, fueron asesinadas de manera salvaje en su domicilio. La mayor fue apuñalada mientras que la niña fue estrangulada, aparentemente con el cinto de su guardapolvo.
El presunto asesino fue identificado como Arturo “Antoñito” Villalba, de 41 años, un hombre de la zona que se encuentra prófugo. La pareja de Isondú Marisel, Miguel Andrés Zárate, de 24 años, fue quien descubrió escenario al regresar a su casa, por las 18 horas y ver a Villalba huir del lugar. Zárate, aunque no es el principal sospechoso, permanece detenido mientras se intensifica la búsqueda de Villalba.
Según las fuentes judiciales, la coartada de Zárate fue corroborada por su empleador y se sostiene que la data de muerte, según la médica forense, sería alrededor de las 16 horas, lo que refuerza su testimonio. No obstante, Zárate sigue bajo custodia mientras continúa la investigación a cargo del fiscal subrogante de la Unidad Fiscal de Investigaciones Concretas (UFIC) de Monte Caseros, Federico Gutiérrez.
Durante la investigación, se recolectó varias pruebas en la escena del crimen. Entre ellas un machete, un cuchillo, tres teléfonos celulares y unas zapatillas con manchas de sangre. A 15 metros de la casa, la Policía encontró un trozo de cable, una silla y un buzo, sugiriendo que Villalba intentó ahorcarse.
El informe forense reveló que Marisel presentaba dos puñaladas y múltiples golpes compatibles con machetazos en los antebrazos. Esto indicó que intentó defenderse. No se encontraron signos de ataque sexual.
En cuanto a Aitana, se cree que fue estrangulada primero, ya que el cinto de su guardapolvo no tenía manchas de sangre, a diferencia del resto de la casa.
La búsqueda de Villalba se extiende a los montes cercanos y localidades adyacentes como Curuzú Cuatiá, donde tiene familiares. Efectivos policiales de Colonia Libertad, Curuzú Cuatiá y Monte Caseros participan en el operativo, utilizando drones y perros rastreadores.
Desde la organización Mujeres de la Matria Latinoamericana de Corrientes (Mumala), se emitió un comunicado denunciando la violencia machista y exigiendo justicia: “Dos hermanas son las nuevas víctimas que se cobra la violencia machista. No podemos permitir que estas tragedias continúen. Exigimos justicia y que pare la impunidad de una vez por todas”.