El acusado Augusto Pedro Fiorentino (54) dijo que creyó que su mujer dormía, con ese argumento, se fue a trabajar y al volver llamó al 911.
Un detenido por el femicidio de su concubina, quien fue hallada asesinada en su casa de la ciudad balnearia de Villa Gesell, se declaró inocente al asegurar ante la fiscal que él creyó que la mujer estaba «dormida» y que, como no se despertaba, llamó a la Policía.
Se trata del acusado Augusto Pedro Fiorentino (54), quien fue indagado por la fiscal Verónica Zamboni acusado del delito de «homicidio agravado por el vínculo y por mediar violencia de género« de Sandra Pastori (45), que presentaba signos de haber sido asfixiada y murió por un paro cardíaco.
Fuentes judiciales informaron que el imputado declaró que el día del hecho se levantó por la mañana y, como creyó que su mujer estaba «dormida», se fue a trabajar.
Siempre según el acusado, cuando éste regresó, advirtió que su concubina seguía igual, por lo que llamó a la Policía.
Los mismos voceros señalaron que el hombre relacionó lo ocurrido con que la víctima era una persona alcohólica.
«No tuvo ninguna muestra de angustia durante su relato», explicó un vocero judicial, quien consideró que esta actitud aumenta las sospechas sobre el detenido.
En tanto, tras la indagatoria, la defensa de Fiorentino solicitó la excarcelación cuestión que será resuelta por el juez de Garantías 5 David Mancinelli.
Por su parte, los médicos forenses determinaron que la mujer sufrió «un paro cardíaco traumático producido a consecuencia de maniobras previas de asfixia y trastorno sensorio debido al corte de circulación sanguínea por presión en carótidas».
Para los peritos, «hubo un probable doble mecanismo asfíctico».
El crimen ocurrió entre las 21.30 del 22 y las 9.30 del 23 de octubre último, en una casa situada en Paseo 107 bis y avenida 21, de Villa Gesell, donde la víctima convivía con el ahora detenido.
Luego de que la autopsia confirmó que se trató de un homicidio, la fiscal Zamboni, de la Unidad Funcional de Instrucción 6 de Villa Gesell, ordenó la detención del concubino, a quien la mujer había denunciado por violencia de género en varias oportunidades.