El personal participó de jornadas de formación y sensibilización.
A fines de enero se viralizaba un posteo de denuncia en las redes sociales. El local gastronómico “Grizzly Bar”, de la zona de Tres Cerritos, había discriminado a Alejandro Gallo por su vestimenta. No lo dejaron ingresar porque tenía puesta una bermuda, zapatillas y gorra.
La indignación en Facebook y los pedidos de cancelación se replicaron al instante. A las pocas horas el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI) tomaba conocimiento del hecho. Gustavo Farquharson, titular del organismo nacional en Salta, confirmaba que la denuncia había sido recibida y señalaba que “el derecho de admisión no puede ser discriminatorio”.
Cuarto.com.ar informó que desde la gerencia de Grizzly aseguraron que estaban al tanto de lo sucedido y culparon a los empleados de seguridad. Un par de semanas más tarde, tanto empleados como dueños y responsables del bar debieron tomar un par de cursos contra la discriminación.
Los cursos se realizaron los días lunes 8 y martes 9 de febrero. Fueron “dos jornadas de formación y sensibilización para la erradicación de prácticas discriminatorias con les trabajadores, dueños y responsables del Bar Grizzly”. Además explicitaron que el objetivo fue “generar nuevas prácticas inclusivas que permitan garantizar espacios de esparcimiento y entretenimiento libres de prácticas discriminatorias”.
En tanto, Gallo se manifestó respecto a lo sucedido en las redes sociales: “Me alegra que mi denuncia no haya quedado en la nada, y si sirve para cambiar alguito en Salta, para hacernos más inclusivos, ya estoy hecho”.