El gobernador Gustavo Sáenz se acercó al velatorio para ofrecer sus respetos a la familia y saludar también a los compañeros de tareas de la joven.
Salta tuvo un fin de semana de luto. Mientras la mayoría de las familias se reunían para celebrar y compartir del Domingo de Pascua, Fátima Cardozo se encontraba tomando su turno de trabajo, para realizar los controles de alcoholemia.
En las primeras horas del domingo, Fátima fue víctima Daniel Sebastián Castilla, un chofer alcoholizado, que la atropelló y se dio a la fuga. En ese momento, la efectivo fue llevada en código rojo al hospital San Bernardo. La mujer nunca despertó. Ese mismo día, fuentes confirmaban a El Tribuno, que la efectivo tenía muerte cerebral.
En la noche del lunes, la familia autorizó la donación de órganos de la joven, que se concretó este martes desde las 6,30 con la llegada de una equipo de médico desde Córdoba y Buenos Aires.
El triste final de la joven de 30 años, que además era madre de un pequeño, golpeó a la Policía de la Provincia, y se tomó la decisión de que sus restos fueran velados en el patio de la Central de Policía de la Provincia.
Hasta allí se acercó esta noche el gobernador Gustavo Sáenz para ofrecer sus respetos a la familia y saludar también a los compañeros de tareas de la joven.
Por el momento, no se confirmó el horario del sepelio de la joven, que prestaba servicio en la División Ejido Municipal dependiente de la Dirección General de Seguridad Vial.
Fátima Virginia Cardozo Romero, de 30 años, se incorporó a las filas de la Institución el año 2014 y durante 8 años se desempeñó en distintas dependencias, Comisaría Nº 5 Capital, ComisarÍa Nº 7 El Tribuno, Comisaría Nº 12 Santa Ana, Comisaría Nº 43 Embarcación, entre otras dependencias.