A los dos hermanos, de quienes se preservan los nombres para resguardar la identidad de la menor, se les hizo conocer la causa de detención y fueron trasladados a la dependencia, para luego dejar formalizada la imputación.
Una auténtica odisea tuvo que llevar a cabo la fuerza de seguridad provincial para llegar hasta un lugar y detener a un hombre acusado de violar a una menor. Fue uno de los procedimientos que realizaron los uniformados salteños en el Valle de Lerma, dado que en un segundo operativo, también en un paraje inhóspito, detuvieron al hermano del primero, acusado de abigeato. Ambos fueron trasladados por la Policía e imputados por el fiscal en turno.
Los dos procedimientos se realizaron de manera simultánea, con el propósito de reducir el margen de acción que pudieran tener los sospechosos. Para llegar al paraje La Calderilla, distante a unos 150 kilómetros de Campo Quijano, personal policial de las unidades regionales 10 y 11, junto a personal de la subcomisaria de San Luis, destacamento de La Silleta, Policía Rural y Ambiental se trasladaron en móvil hasta el paraje Pascha, y de ahí caminaron unos siete kilómetros.
Cerca de las 18.30 del miércoles los policías irrumpieron en el domicilio del sospechoso, quien frente a los uniformados se puso agresivo. Agarró un cuchillo y se metió a una pieza, desde donde amenazaba con «matar a quien ingresara por él». Sin embargo, los policías lograron apresar al acusado sin que nadie resultara lesionado.
Para regresar hasta el móvil policial caminaron durante toda la noche. El hombre fue puesto ante la Justicia acusado de abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo a una menor de edad.
Mientras que en la misma jornada, en el paraje Potrero de Uriburu, cerca de las 10 efectivos de varios destacamentos ingresaron a un domicilio donde detuvieron al otro hermano, acusado de abigeato.
Los uniformados secuestraron elementos probatorios para la causa, como partes de un animal faenado, una sierra con adherencia de restos de carne y un hacha con adherencia de restos de carne, entre otros.
A los dos hermanos, de quienes se preservan los nombres para resguardar la identidad de la menor, se les hizo conocer la causa de detención y fueron trasladados a la dependencia, para luego dejar formalizada la imputación. Intervino la Fiscalía Penal a través del doctor Daniel Escalante.