Los operativos se llevan a cabo en terrenos que presentan malezas altas y escombros y en aquellos que tampoco están cerrados. La limpieza corresponde a los propietarios.
La Municipalidad intensificó este año los controles sobre terrenos baldíos en mal estado con el fin de detectarlos y, mediante las actas de infracción, intimar a los propietarios a sanearlos y brindar mayor seguridad a los vecinos.
El año pasado, debido a la pandemia y a las restricciones, la Secretaría de Servicios Públicos y Ambiente sólo pudo concretar 42 actas de infracción mientras que este año con más flexibilizaciones sanitarias se llevan labradas 400 actas hasta la fecha.
Desde la Subsecretaría de Política y Control Ambiental se detalló que los operativos comprendieron varios barrios de la ciudad.
Cabe destacar que los terrenos baldíos deben estar cerrados, con pasto corto y libre de escombros. De esta manera se reducen hechos de inseguridad y presencia de insectos y alimañas.