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Política

Las provincias más grandes del interior aceleran el proceso de flexibilización de la cuarentena

Mendoza es una de las provincias que más actividades autorizó para reactivar la economía golpeada por el coronavirus.


La presión de los comerciantes y los empresarios de los sectores productivos es cada vez más fuerte y en las últimas horas fue el motor que aceleró en las provincias más grandes del interior el proceso de flexibilización de la cuarentena dispuesta por el coronavirus.

Santa Fe, Córdoba, Tucumán Entre Ríos son algunos de los distritos donde los gobernadores habilitaron nuevas excepciones. En Santa Fe, Omar Perotti anunció anoche que le pidió permiso al gobierno nacional para poner en marcha comercios y obras de construcción en los aglomerados de Rosario y Santa Fe, que por sus tamaños habían quedado fuera de las zonas que se reactivan desde mañana. El gobernador comunicó también la reapertura comercial y productiva en el resto de las ciudades de la provincia, a partir de mañana.

En Tucumán volvió a ponerse en marcha ayer la obra pública y desde el lunes 11 está previsto que empiece a trabajar la construcción en general. Además, el gobernador Juan Manzur analiza pedirle autorización a la jefatura de gabinete para que los comercios de su provincia abran la puertas por la tarde.

En la misma línea, en Entre Ríos se habilitó a los intendentes a avanzar con la apertura de actividades comerciales y oficios, y en Córdoba 371 municipios ya iniciaron las actividades de comercio, obras privadas, bioseguridad para el ejercicio de profesiones liberales y control sanitario industrial.

Provincias como Mendoza, Jujuy Corrientes (donde abrió incluso un shopping), hicieron punta en materia de reactivación de distintos sectores y hoy siguen avanzando con las flexibilizaciones. A partir del mes próximo, en Jujuy volverá a funcionar el turismo, solo con residentes de la provincia.

En Córdoba, por ahora el permiso es solo en las «zonas blancas», aquellas que cumplieron tres semanas sin casos confirmados de Covid-19. Pero la presión crece: en la ciudad de Córdoba se abrió un frente de conflicto porque los comerciantes anunciaron que desde el lunes abrirán medio día sus puertas, más allá de cuál sea la decisión del Gobierno respecto de la cuarentena.

Santa Fe, con un nuevo esquema desde mañana

El gobernador Perotti decidió flexibilizar la cuarentena en esta provincia, donde se liberarán a partir del miércoles rubros como el comercio, construcción privada, mudanzas, profesiones liberales, actividades inmobiliarias y peluquerías.

Esta disposición no incluye a los grandes aglomerados, como Rosario y Santa Fe, que por tener más de 500.000 habitantes deben esperar la autorización de la jefatura de Gabinete, que este miércoles avalaría que en las dos principales ciudades de la provincia se reactiven el comercio minorista y las obras de construcción de hasta cinco trabajadores, entre otras actividades. En una primera etapa -como adelantó LA NACION -, la idea en Rosario es que se divida la actividad en dos turnos para evitar la concentración de personas en la zona céntrica y en el transporte público.

Perotti decidió dar ayer un mensaje a las 20.30 junto a su ministro de Salud, Carlos Parola, luego de que la semana comenzara con una fuerte presión de los comerciantes y empresarios de distintas ciudades para que se libere la cuarentena.

Esta postura se intensificó durante los últimos días porque desde el 9 de abril pasado la ciudad de Santa Fe no tiene casos de Covid-19 y desde hace nueve días tampoco se detectaron nuevos infectados en Rosario, donde el número de personas recuperadas que estuvieron enfermas de coronavirus ya es superior a las infectadas. En la provincia hay 243 casos detectados, pero desde hace seis días no hay personas que hayan contraído el virus.

Hasta ahora Perotti fue siempre detrás de lo que disponía el gobierno nacional. La presión del sector comercial, con bajas en la facturación que -según la Municipalidad de Rosario- podría llegar al 60 por ciento de abril, lo obligó a tomar iniciativas propias en Santa Fe, después de que mejoraran los índices de contagio.

El anuncio de las medidas apuntó a evitar que la cuarentena se levantara sin el propio control del Estado, que fuera una cuestión espontánea, influida por la desesperación de los comerciantes. Ese era el temor del intendente Pablo Javkin: que el Estado pierda la capacidad de imponer los lineamientos de la cuarentena, como ocurrió hasta ahora.

Este martes Perotti mantendrá encuentros con representantes de los centros comerciales de la provincia, a excepción de los dos grandes aglomerados, para pulir la apertura de los locales y el cumplimiento de los protocolos de distanciamiento social. En esta etapa, según anunció Perotti, «los presidentes comunales e intendentes van a ser los responsables del control de esas actividades autorizadas».

El gobernador anunció que se permitirán «actividades del comercio mayorista y minorista, mudanzas con fletes y empresas autorizadas, actividades inmobiliarias, ejercicio de profesiones liberales, obras privadas de hasta cinco trabajadores y el servicio de peluquería, manicuría y podología» como las nuevas tareas exceptuadas del cumplimiento de la cuarentena en el marco del decreto 408/20.

El mandatario recalco: «Si alguna vez se enciende una luz amarilla, volveremos atrás, eso significa volver a restringir actividades».

Entre Ríos habilita la actividad minorista

El gobernador de Entre Ríos, Gustavo Bordet, dio un paso más en el proceso de flexibilización en el marco de la cuarentena por la pandemia de coronavirus. A través de un de decreto autorizó la apertura para comercios minoristas y oficios. Todo debe permanecer bajo las resoluciones que se redactan a diario en el Comité de Emergencia Sanitaria (COES) que integran todas las áreas del Poder Ejecutivo y especialistas.

El decreto N° 624 deja en poder de los municipios la facultad de habilitar comercios, durante el aislamiento social, preventivo y obligatorio que rige desde el último 20 de marzo. La norma considera que «resulta conveniente autorizar nuevas actividades económicas aunque atendiendo a las especiales características de la crisis sanitaria» y que «es pertinente permitir el desarrollo de actividades comerciales, servicios y oficios».

Según se desprende del decreto, el COES tendrá poder de veto y «podrá suspender habilitaciones conferidas por los municipios o comunas por acto debidamente fundado en razones sanitarias». No obstante, «el control de los protocolos sanitarios será ejercido por la autoridad habilitante municipal o comunal».

Lo que se esperaba -según comentaron intendentes oficialistas y opositores consultados por LA NACION- era el permiso para realizar actividades de esparcimiento que sugirió el presidente Alberto Fernández y que el Gobernador había decidido frenar una semana, pero en el decreto no se hace referencia a ese ítem.

«A partir de la decisión del gobierno provincial para habilitar el comercio minorista, servicios y oficios, si hay alguna actividad industrial, sectorial y productiva (que aún no está habilitada para funcionar), el protocolo para solicitarlo es el mismo por el cual el sector productivo debe elevar un instructivo de funcionamiento con el aval de las autoridades municipales y será evaluado por autoridades provinciales. Después, se dispondrá si se hacen o no nuevas excepciones», amplió el ministro de Producción, Juan José Bahillo.

En las principales ciudades, como Paraná, Concordia y Concepción del Uruguay, los intendentes comenzaron este martes a dictar resoluciones municipales para autorizar el inicio de actividades comerciales. En algunos casos se fijaron horarios diferenciados para cada una de ellas y así evitar la aglomeración de gente en las calles.

Bordet se refirió al cierre de fronteras interprovinciales. «No tenemos un tiempo establecido para cuándo será la reapertura «, dijo y en esa línea aseguró que la decisión «dependerá de las relaciones exteriores y Cancillería para la habilitación de fronteras con otros países, mientras que el paso a provincias vecinas se monitorea permanentemente de manera estricta».

La construcción, motor de la reapertura en Tucumán

A más de un mes y medio desde el inicio de la cuarentena por la pandemia de coronavirus, que obligó al cierre de miles de negocios e industrias, el gobierno de Tucumán estudia alternativas para flexibilizar distintas actividades que vienen reclamando una urgente reactivación. Según números del sector privado, el aislamiento obligatorio provocó una caída del 80% en la actividad comercial.

Este lunes se reactivó la obra pública, con restricciones horarias y con estrictas medidas sanitarias que tienen como objetivo preservar la salud de los trabajadores del sector; además, desde el próximo lunes 11 está previsto el retorno a la actividad de la obra privada. También desde esta semana se habilitó el trabajo de las escribanías, con la condición de que realicen sus actividades por turnos y con puertas cerradas.

El sector más golpeado por el parate es el comercio, que desde hace dos semanas viene reclamando al gobernador Manzur que estudie la posibilidad de flexibilizar la cuarentena, aunque sea de manera parcial. En ese marco, el mandatario tucumano anunció ayer que analiza la posibilidad de solicitar autorización al Gobierno nacional para que los negocios puedan abrir sus puertas por la tarde, cumpliendo los protocolos sanitarios.

«De a poco, ahora empezó la obra pública y estamos gestionando para que la semana que viene se reinicie la obra en la parte privada. Estamos conversando con el Gobierno nacional para ver si por las tardes podemos empezar a flexibilizar el comercio, pero sabiendo que si se produce un aumento de casos [de coronavirus], tendremos que volver a cerrar de manera preventiva», aseguró Manzur en declaraciones a la prensa.

Uno de los pedidos que Manzur ya realizó al Gobierno nacional es que se autorice la flexibilización del aislamiento preventivo para garantizar el normal desarrollo de la zafra azucarera, que se extiende desde mayo hasta noviembre, actividad industrial que genera aproximadamente 200.000 puestos de empleo de manera directa e indirecta en el NOA.

Se hizo el mismo planteo a la Nación para facilitar la campaña del sector citrícola, que comenzó en marzo y finalizaría en agosto, y que genera aproximadamente 50.000 fuentes de empleo en la región.

Hasta ahora, en Tucumán fueron confirmados 41 casos de Covid-19. Los últimos contagios notificados este lunes por las autoridades sanitarias corresponden a tres pacientes, dos varones de 21 y 22 años, y una mujer de 29, con antecedentes de viajes a Estados Unidos, que están cumpliendo aislamiento domiciliario en buen estado de salud.

De los 41 casos de coronavirus que contabiliza esta provincia, 15 pacientes siguen con aislamiento domiciliario, 19 fueron dados de alta, tres permanecen internados en hospitales públicos y cuatro fallecieron.

La rebeldía de los comerciantes de Córdoba

En la ciudad de Córdoba se abrió un frente de conflicto en el comercio ya que un sector anunció que desde el lunes abrirán medio día, más allá de cuál sea la decisión del Gobierno respecto de la cuarentena. Tamara Sternberg, de la Red de Comerciantes Unidos, dijo que las Pymes abrirán: «No estamos en un estado de sitio. Estamos en una emergencia y viendo lo que es mejor para las familias y para cada uno. No saben cuáles son las necesidades».

Sternberg adelantó que presentarán un amparo. Desde la Cámara de Comercio indicaron que esa no es la posición oficial.

En la provincia son 371 los municipios que iniciaron -con los debidos protocolos sanitarios- las actividades de comercio, obras privadas, bioseguridad para el ejercicio de profesiones liberales y control sanitario industrial. Se consideran «zonas blancas», por criterio sanitario, las localidades que no presentan casos confirmados de Covid-19, luego de 21 días del último hisopado negativo. Se habilitó a profesiones independientes, obra privada, industria y comercio. Y sigue prohibido el tránsito de una «zona roja», con altos contagios, a una «blanca».

Mendoza, con flexibilización en en el interior y el Gran Mendoza

Mendoza se abre cada vez más en plena pandemia de Covid-19. Las reactivación del comercio y de las tareas profesionales ya son una realidad en el interior de la provincia, mientras que en el Gran Mendoza, el área metropolitana con más de 500.000 habitantes, no solo están habilitadas las salidas recreativas, mediante el Decreto 563/2020, sino que funcionan la construcción pública y privada, y el comercio, con entrega domiciliaria.

Asimismo, en las zonas alejadas dentro de este conglomerado compuesto por Capital, Godoy Cruz, Guaymallén, Las Heras, Maipú y Luján de Cuyo, también comenzaron a permitirse cambios. Por ejemplo, en la localidad montañosa de Uspallata, en la comuna de Las Heras, donde regirá la misma modalidad que en el interior de Mendoza. En los próximos días podrían sumarse otros sitios de Luján, como Potrerillos y Cacheuta. También, hay intendentes de estas comunas que piden que se autorice la actividad en los parques industriales así como el servicio doméstico, peluquerías, profesiones liberales y el sistema de búsqueda de productos en los locales, conocido como «take away».

En este sentido, el jefe comunal de Luján, Sebastián Bragagnolo, insiste con la propuesta. «Muchos de estos comercios ya están habilitados en modo Delivery y por lo tanto ya se movilizan a sus locales, el problema es que no tienen la capacidad ni estructura para funcionar de esa manera. Creo que habilitarles a realizar la venta vía web, pero retirar por el local, ayuda», indicó el funcionario.

Mientras se discuten los planteos, desde el gobierno local buscan dejar en claro que en toda la provincia se mantienen los protocolos y las medidas de distanciamiento e higiene así como la modalidad de terminación de DNI para salir a pasear o realizar compras. De esta manera, se busca que solo la mitad de la población de cada lugar se encuentre en movimiento. Hasta ahora, en tierra cuyana son 80 los contagiados por coronavirus y 9 los fallecidos.

En un recorrido que realizó LA NACION por las principales zonas urbanas del Gran Mendoza pudo comprobar que el sistema de solicitud de documentos no se cumple en todos los supermercados o comercios de los diferentes rubros al tiempo y que los controles en el ingreso a la capital provincial han comenzado a relajarse con los días. «No podemos frenar y pedir la documentación a cada conductor, entendemos que la mayoría va a trabajar. Se generan largas filas y buscamos evitar el colapso; lo que sí exigimos es el barbijo», comentó un efectivo apostado en el puesto fijo del tradicional monumento del Cóndor, en la intersección de los accesos Este y Sur.

En tanto, mientras se avanza con reuniones con los intendentes y luego con Nación para determinar los pasos a seguir, el gobernador Rodolfo Suarez evaluó como «exitosa» la primera semana de «relajamiento» en los departamentos que se encuentran fuera de la zona urbana.

«Los paseos transitorios se cumplen en tiempo y forma por parte de los vecinos. Los intendentes ven con mucho agrado la reactivación de la actividad económica en su departamento. Este comportamiento se va a medir y monitorear una semana más, la continuidad depende de los ciudadanos», indicó el mandatario.

«En el caso del Gran Mendoza, hemos evaluado las caminatas recreativas y estas han sido realizadas de forma responsable. De todos modos, vamos a seguir una semana más analizando la situación y seguro a mediados de esta semana tomaré contacto con el presidente de la Nación para conversar cómo seguimos de cara al 10 de mayo», expresó Suarez.

Corrientes, pionera en habilitar el comercio

Entre el 13 y el 26 de abril, el gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, anunció dos paquetes de medidas que moldearon la tercera etapa de cuarentena. Fueron medidas de validez semanal, pero que terminaron ratificadas este lunes 4 de mayo. Además, la flexibilización se amplió a las actividades físicas y de recreación controladas, que no estaban habilitadas en la provincia.

Desde este miércoles, por esta razón, se permitirán las caminatas y trotes deportivos en tres lugares de la Capital y en un lugar en cada uno de los municipios de la provincia.

Desde hace casi diez días se permitió la apertura de los comercios y Corrientes hizo punta con la habilitación de un shopping, aunque con muchas restricciones, lo cual evitó la aglomeración de gente. Pueden trabajar las peluquerías, cobradores de servicios, agencias de viajes, inmobiliarias, administración de colegios privados, iglesias y templos. También empezaron a trabajar los profesionales: abogados, arquitectos, escribanos, contadores e ingenieros. Se habilitó el servicio doméstico y atención domiciliaria de niños. El transporte público sigue con circulación mínima.

Desde el 13 de abril están habilitadas la actividad forestal, ganadera, cítrica, minera, la producción de arroz, yerba y té. Los bancos y casas de crédito (con turnos), la emergencia odontólogica, librerías, pinturerías e insumos informáticos, y la industria textil (solo para la confección de productos de salud, especialmente barbijos). Obra pública y obra privada, sin utilización de transporte público. Talleres mecánicos, lavaderos, gomerías, venta de repuestos, neumáticos y autopartes. Consultorios médicos y atención médica, sin espera. Ópticas y estacionamientos.

Las escuelas y universidades siguen y seguirán cerradas. Cada municipio tiene potestad de determinar aperturas informadas y controladas. Sucede que la situación epidemiológica de Corrientes está bajo control. La tasa de duplicación de casos supera los 30 días. Hasta este lunes, la provincia registró 50 casos positivos acumulados (33 altas), 17 casos activos, solo un internado (clínicamente estable) y ningún muerto.

Chaco, una provincia muy golpeada que empieza a abrirse

El gobernador Jorge Capitanich se reunió el viernes con los funcionarios del gabinete ampliado para analizar la salida progresiva del aislamiento preventivo después del 10 de mayo. Mientras tanto, rige una cuarentena administrada por zona, que dividió a la provincia en tres según los niveles de riesgo, la densidad poblacional y la cantidad de casos diagnosticados de coronavirus. La zona de riesgo alto incluye a siete localidades, entre ellas Resistencia, su capital. En esta región se mantienen restricciones para todas las actividades que impliquen aglomeración de personas y las habilitaciones son con protocolos de bioseguridad. En las zonas de menor riesgo, las actividades tienen un régimen un poco más laxo.

Las habilitaciones incluyen: salidas diarias recreativas para personas con discapacidades y un acompañante, en un radio de 500 metros de sus domicilios; hoteles (para alojamiento de personas que requieran por recomendaciones médicas o que presten servicios esenciales), construcción, profesionales, peluquerías, ladrillería, albañilería y pinturería. Transporte (con reducción de cantidad de pasajeros, frecuencias y adecuación de recorridos), estaciones de servicios y gomerías. El transporte de carga no puede realizar paradas en la provincia salvo en lugares de descanso y estaciones habilitadas.

En Chaco también continúan suspendidas las clases presenciales en todos los niveles y todas las modalidades; la realización de eventos públicos y privados que impliquen la concurrencia de personas; las actividades de centros comerciales, cines, restaurantes, bares, gimnasios, clubes y cualquier espacio público o privado que implique la concurrencia de personas.

Hasta la noche del lunes 4 de mayo se registraron 349 casos positivos de Covid-19 en la provincia. Actualmente hay 14 personas internadas, 5 en estado crítico y 5 en estado moderado. Chaco fue una de las provincias más golpeadas por el coronavirus: cuenta 19 muertos desde que empezó la pandemia.

Jujuy abre el turismo interno

Debido a los pocos casos de coronavirus registrados, desde el inicio de la cuarentena la provincia ha conseguido llevar adelante medidas de reapertura económica en diversos sectores y desde el sábado próximo se volverán a abrir confiterías, restaurantes, galerías y shoppings.

Además, a partir del 1º de junio se abrirá el turismo local para todos los residentes en la provincia.

Las aperturas se harán dentro del marco de un protocolo estricto, en orden de las normas de restricción y alejamiento social dadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), informaron fuentes oficiales. En este sentido, los restaurantes deberán adaptar sus salones con la ubicación de mesas (para un máximo de cuatro personas), a dos metros de distancia, aunque el resultado provoque una menor cantidad de comensales para la atención. Mientras que los establecimientos que, por cuestión de espacio, no puedan mantener las mesas adentro, podrán ubicarlas en las veredas, respetando siempre las recomendaciones.

El sector gastronómico elaboró un protocolo denominado «Gastrotur Jujuy», consensuado con el Comité Operativo de Emergencias (COE) provincial, con las normas que deberán cumplir los establecimientos. Las medidas se basan en cuidar la salud de los clientes, trabajadores y proveedores con vista a la reapertura del turismo local.

Jujuy ya lleva más de un mes sin la confirmación de nuevos casos de coronavirus. Por eso, el gobernador Gerardo Morales dijo que es necesario iniciar un proceso de flexibilización respecto al aislamiento social, para empezar a recuperar la economía regional.

Fuente: La Nación

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