Moscú culpa a EE.UU.
La Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria de Brasil (ANVISA) decidión no conceder la autorización para la importación en carácter de emergencia de la vacuna Sputnik V contra el coronavirus debido a la falta de documentación sobre la misma.
Los cinco directores del cuerpo colegiado del órgano definieron por unanimidad rechazar el pedido realizado por nueve estados del país vecino.
Antonio Barra Torres, presidente de ANVISA, dijo que los fabricantes no entregaron el informe técnico completo de la vacuna. También, explicó que el fármaco aún no cuenta con aprobación en Estados Unidos, la Unión Europea y Japón, países que gozan de una alta reputación en ese tipo de análisis.
A esto agregó que la presentación del registro de la vacuna otorgado por el Ministerio de Salud ruso y por gobiernos como el de la Argentina no poseían informaciones básicas exigidas en su territorio.
En Rusia, rechazaron los argumentos del regulador brasileño e insinuaron que la presión de Estados Unidos fue determinante en esta decisión.
“Los retrasos de ANVISA en la aprobación de Sputnik V son lamentablemente de orden político y no tienen nada que ver con el acceso a la información o con aspectos científicos”, se posteó en la cuenta de la vacuna en Twitter.
También se añadió que: “El Ministerio de Salud de Estados Unidos, en su informe anual de 2020 hace varios meses, declaró públicamente que el agregado sanitario de Estados Unidos ‘había convencido a Brasil de rechazar la vacuna rusa’”.
Por su parte, Dmitri Peskov, portavoz del presidente Vladimir Putin, dijo que el Gobierno ruso está dispuesto a proporcionar la información necesaria para agilizar los trámites: “Los contactos continuarán. Si no hay datos suficientes, se les proporcionarán, no cabe duda”, dijo Peskov.
Esta decisión por parte de la agencia se da en un momento en que los números de infectados y muertos en Brasil aumentan significativamente. Ayer se registraron 3.086 muertes, lo cual eleva el número total a más de 392.000. En este sentido, el dato más preocupante es que en los primeros cuatro meses de 2021 ya hubo más decesos que en todo 2020: 194.945 el año pasado y más de 197.000 este año.
Respecto al número de casos, Brasil, que posee 210 millones de habitantes, ya superó los 14,4 millones de infectados: esto significa que el 6,7% de su población ya se contagió. Ayer hubo 72.140 nuevos infectados.
Debido a la crisis sanitaria que atraviesa el país, el Senado brasileño instaló oficialmente ayer una comisión para analizar la actuación de Jair Bolsonaro y sus funcionarios. Ahora, la comisión parlamentaria tendrá como principal misión analizar si hubo negligencia o actos de corrupción en el manejo de la pandemia.