Iniciado el nuevo año y con las expectativas del verano, lo números que está dejando la pandemia del coronavirus para el sector turístico no son muy alentadores.
Un 30% de las agencias de viajes han cerrado sus puertas a lo largo del 2020. Lamentablemente algunos empresarios del sector estiman que una vez finalizada la temporada de verano ese porcentaje aumentaría en 10 puntos.
Se trata de las agencias minoristas, en muchos casos familiares, que no resistieron a la situación económica, a pesar de las ayudas que el Gobierno nacional les otorgó. Entre las facilidades, algunas optaron por compartir la estructura para abaratar los costos fijos.
A su vez, cerca del 20% del total de las agencias optaron por no cerrar, pero sí introducir diferentes rubros relacionados con el turismo, como, por ejemplo, vender productos gastronómicos regionales, artesanías o guías y libros de viajes.
En los últimos días, el ministro de turismo y deportes, Matías Lammens, aseguró que solicitará una nueva ayudar exclusiva para las agencias, luego de una reunión con el presidente de la FAEVyT, principal entidad que las representa.