Cansada de las crueles palabras de su ex, dio a entender que vivió un calvario a su lado durante su lucha por tener un hijo.
El culebrón de Luciana Salazar y Martín Redrado sumó un nuevo episodio, y ambos están más picantes que nunca. El economista se cansó de estar en boca de todos por las constantes acusaciones de su ex y lanzó una frase bastante fuerte que involucra a Matilda, la nena que llegó a la vida de la rubia en diciembre de 2017, a través de un vientre subrogado en Estados Unidos.
“Soy el único hombre que hizo posible que fuera madre. Yo no soy el padre de Matilda, pero lo hice posible porque era su deseo y que me trate así es muy injusto y doloroso”, dijo en una conversación con Mariano Iúdica, que habló del tema en Polémica en el bar.
Dolida por sus dichos, la modelo no pudo quedarse callada, y en una entrevista con Primicias Ya dio a entender que vivió un calvario en la época en la que deseaba tener un hijo a su lado.
“Ahora él es la víctima. Pero se olvidó por todo lo que me hizo pasar para llegar a ser madre. Fue mi novio durante 8 años. 8 años de los cuales varios fuimos a centros de fertilidad juntos”, expresó.
Salazar sostuvo que la culpa del escándalo que los involucra es todo responsabilidad del economista: “¿Quién mandó a su abogado a humillarme injustamente y a tratarme de mentirosa? ¿Quién mandó al hijo a que se metiera? ¿Quién se expuso a que le saquen una foto? Sus dichos se contradicen con sus hechos, algo muy común en él. Es mentira que me inició acciones legales, sabe que si lo hace pierde. Todavía sigo esperando, no sé por qué tarda tanto. La verdad está de mi lado y las pruebas y testigos sobran”.
Y concluyó: “Me olvidé que también mando amigos a hablar. ¿Y decime a quién yo expuse de mi lado para que hable? A nadie. Yo solita me defendí porque no necesito a nadie que me defienda. Lo de él es una actitud cobarde y de poco hombre”.
En julio de 2017, Marcelo Polino -íntimo amigo de Luciana- contó que ella perdió varios embarazos durante su noviazgo con Redrado. Por eso no le quedó otra opción que alquilar un vientre en Estados Unidos. Los gastos corrieron a cargo del economista.
“Viene de un proceso largo, tuvo varios intentos. Ella perdió bebés por un tema de salud y no quería decir nada hasta que no se concretara y pasaran los tres meses como esperan todas las madres. Desde que yo la conozco, lo único que quería era ser madre. Encontró en esto -la subrogación- la posibilidad de concretar su deseo. Martín la acompañó en ese proceso hasta que llegó un punto en el que él no deseaba participar y ella siguió adelante”, comentó el periodista.