Los gerentes de los hospitales San Bernardo, Oñativia y Materno Infantil cuestionan al gobierno provincial
A menos de un mes se dispuso que el uso del barbijo fuera opcional en espacios abiertos y sin aglomeraciones, hoy, profesionales de la salud le piden al Gobierno de la provincia que tome medidas urgentes y dejar de ser obsecuentes con el Gobierno nacional.
Ayer por la noche el doctor Marcelo Nallar, quien es el gerente del hospital Oñativia, mantuvo un diálogo con DNISALTA.com y DNI RADIO 97.5. En el mismo pidió acción y autonomía al Gobierno.
Con duras declaraciones contra el Gobierno, Nallar se mostró incluso en sintonía con aquello que ya había expresado a viva voz otro prestigioso profesional de la salud con competencias ejecutivas durante buena parte de la pandemia: el doctor Francisco Aguilar, ex presidente del Comité Operativo de Emergencia de la Provincia, quien presentara su renuncia en junio de este año, luego del descontrol suscitado en aquellos polémicos y bochornosos homenajes al Héroe Gaucho Martín Miguel de Güemes por el Bicentenario de su fallecimiento.
En aquella oportunidad, Aguilar había manifestado que el Gobierno y sus funcionarios estaban más en modo campaña que en modo COVID.
Más de cuatro meses después, el gerente del Hospital Oñativia le dio la razón a su colega y también hizo alusión a la influencia de la campaña política y su fiebre, de cara a los comicios legislativos nacionales del próximo domingo 14 de noviembre.
«Es muy malo el mensaje que se está dando al indicar que al barbijo ya no es necesario usarlo al aire libre. La indicación y el relajo de las autoridades provinciales, de indicar hoy que el barbijo ya no es obligatorio es lo mismo que decir que la pandemia terminó, cuando no hay nada más alejado de la realidad que eso. Hoy tenemos una variante mucho más transmisible (la variante Delta), y que afecta principalmente al grupo de riesgo, al personal de la salud y al grupo de riesgo de la sociedad. El mensaje de que la pandemia ha terminado es una barbaridad, y que nos va a costar muchísimo, y ya se está llevando las primeras víctimas. Mirá la locura de lo que está pasando, que ya falleció una odontóloga del Hospital San Bernardo; hay un trabajador del Hospital Oñativia que está internado en terapia intensiva; en Aguaray también está internado un personal de la salud. Los primeros datos hablan de que en estos últimos meses se han contagiado un 50 por ciento más el personal de la salud que en el mismo mes del año pasado», advirtió el profesional.
Y agregó: «La emergencia en este momento tiene que estar canalizada en que no se muera el personal de salud. Y tenemos que enfocarnos en el problema, no en querer aumentar el porcentaje de vacunados para que después salga un político a decir: ‘Miren qué bueno, tenemos un alto porcentaje de vacunados’. Y para eso usan a los chicos. Dejen a los chicos tranquilos, ya está demostrado que ellos no son un grupo de riesgo en esta pandemia. Salta en esto tiene que tener autonomía y saber decidir a quién hay que vacunar y a quién no. Y no esperar que algún político a nivel nacional, donde están politizados hasta la manija, porque todos lo sabemos, decida empezar a vacunar al personal de salud. ¿Cuántas vidas va a costar este retraso?».
A raíz de estas declaraciones, hoy los gerentes de los hospitales Materno Público Infantil, Federico Mangione; y del San Bernardo, Pablo Salomón,coincidieron en la necesidad de dar marcha atrás y que el barbijo vuelva a ser de uso obligatorio en todos los ámbitos.
Cuestionaron la medida electoralista del Gobierno provincial, que acompañó la medida de Nación, sin advertir que la realidad de Salta es distinta a la de Buenos Aires.
También, recalcaron la necesidad de aplicar una tercera dosis de refuerzo para el personal de la salud ante la ola de casos de la cepa Delta, y tras la confirmación de la circulación comunitaria en Capital y San Martín.