El funcionario confirmó que la medida ya fue conversada con el presidente Alberto Fernández y que la AFIP trabaja para su rápida implementación.
Con la inflación presionando sobre el poder adquisitivo de los argentinos más la carga tributaria limando los aumentos de las últimas negociaciones paritarias, ayer el ministro de Economía, Sergio Massa, anunció que desde el próximo 1 de noviembre subirá el piso mínimo del impuesto a las ganancias para los trabajadores a 330.000 pesos.
El funcionario confirmó que la medida ya fue conversada con el presidente Alberto Fernández y que la AFIP trabaja para su rápida implementación.
«La suba del mínimo no imponible está decidida, será a partir del 1 de noviembre y la AFIP está terminando las proyecciones. Subirá a 330.000 pesos y el objetivo es garantizar que los trabajadores, los que ganan por horas extras o producto de paritarias no lo pierdan por el impuesto a las ganancias», indicó Massa durante una entrevista en el programa «Si pasa, pasa», por Radio Rivadavia.
La suba del piso salarial de ganancias es una demanda del sector de los trabajadores que presiona fuerte al Gobierno ya que muchos de los que estaban exentos del descuento volvieron a tener la retención de ese impuesto. Y otros pasaron a tener una retención mayor, con el agravante de que, si recibieron un aumento de sueldo o realizan horas extras, todo o una parte de ese incremento pasa a ser retenido por la empresa con destino a la AFIP.
Esta situación se derivaba por la falta de actualización del piso salarial a partir del cual el trabajador sufría retenciones cada vez más elevadas por el impuesto a las ganancias, además del impacto por la imparable inflación.
Hasta ahora el salario bruto más bajo alcanzado por el impuesto a las ganancias es, desde junio de este año, de $280.792. En ese mes se había aplicado una actualización del mínimo no imponible, ya que en el inicio de 2022 el umbral había quedado en $225.937.
Nuevo programa
Por otro lado, adelantó que se trabaja en el lanzamiento de un programa de Precios Justos, que convivirá con Precios Cuidados.
Será a más largo plazo para dar certidumbre, tendrá más productos que Precios Cuidados y deberá fijarse el precio en el paquete del producto.
«Como método, los congelamientos dictados por la fuerza no funcionan, sí creo en un trabajo acordado con las empresas de consumo masivo que representan más del 65% de lo que consumimos los argentinos», señaló.
Asimismo, el ministro agregó: «Trabajamos en establecer cuáles son los mecanismos en los que el Estado les puede dar certidumbres en materia de importaciones, créditos y en esa misma mesa tiene que haber un trabajo de acuerdo, no solo de mes a mes que hacemos con Precios Cuidados, sino de largo plazo que llamamos de Precios Justos, que el precio se sostenga que aparezca en el paquete».
Massa advirtió que si no hay certidumbre, «termina pasando que lo que se acordó en una oficina en el Ministerio de Economía o en las empresas después no se refleja en la góndola».