La epidemia obligó a reconsiderar la agenda. Ante el riesgo de despidos masivos por el enfriamiento económico, los sindicatos aplazan discusión salarial
Preocupada por el coronavirus, la CGT intensificó el diálogo con el Gobierno. La central obrera venía tironeando por las paritarias, fondos para las obras sociales, designaciones y un repunte más rápido de la economía. Pero el creciente temor al impacto de la pandemia sumió en un estado de deliberación a los líderes sindicales.
Algunos gremialistas ahora evalúan aplazar la discusión salarial del 2020 a cambio de medidas que está analizando la Casa Rosada para evitar despidos masivos y un refuerzo del sistema sanitario. Este último punto tiene que ver con las prestaciones brindadas por los sindicatos a más de 6 millones de afiliados y que se están viendo afectadas por la situación de emergencia.
El nuevo escenario quedó plasmado en la decisión conocida el lunes de suspender la primera reunión del año del consejo directivo prevista para este jueves y anunciar en su lugar un encuentro virtual. En dos comunicados diferentes, la cúpula sindical se mostró inquieta por las consecuencias de la crisis y explicitó su apoyo a las medidas dispuestas. A la vez, que advirtió sobre «la necesidad de implementar medidas de carácter sociolaboral», sin hacer mención a las paritarias.
De esa manera, la defensa del empleo volvió al tope de las preocupaciones. «Estamos esperando las medidas y en diálogo informal con las autoridades», dijeron a iProfesional desde la CGT.
El reposicionamiento incipiente dentro del sindicalismo comenzó a gestarse en paralelo a la escalada de resoluciones y decretos del Ejecutivo orientados a frenar el contagio de la pandemia: el cierre de fronteras, la limitación del transporte y la ampliación de licencias. También llegaron medidas como el alivio de los sectores vulnerables con un bono de $3.000 a los jubilados que cobran la mínima y la duplicación por única vez del monto de la AUH y la asignación por embarazo.
A tono con el nuevo clima, algunos de los principales gremios evalúan deponer exigencias salariales o, al menos, moderarlas, porque prevén un escenario de mayor caída de la actividad en los próximos meses.
«Si no hay consumo, no va a haber actualización de salario. Cómo voy a pedir un aumento del 30% si la empresa está cerrada y no hay ventas», advirtieron en la Unión Obrera Metalúrgica, en donde prevén un «parate» de las paritarias.Te puede interesar
Fuente: iprofesional.com