Notificaron la acusación al subayudante, que tiene agravante por su condición de efectivo de la Policía Bonaerense y por el uso de arma de fuego.
Facundo Amendolara, el policía de 27 años que disparó a Santiago «Chano» Moreno Charpentier, fue imputado por lesiones gravísimas por el episodio, ocurrido el lunes a la madrugada en el country de Exaltación de la Cruz.
El fiscal Martín Zocca, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 de Delitos Complejos de Zárate-Campana, le notificó la acusación al subayudante, que tiene agravante por su condición de efectivo de la Policía Bonaerense y por el uso de arma de fuego.
El delito de «lesiones gravísimas agravadas por el uso de arma de fuego y por ser funcionario policial», tipificado por el artículo 92 del Código Penal, tiene una pena entre 3 y 15 años de prisión.
Ese artículo califica como gravísima a la lesión que produce la pérdida o el daño de un órgano -como en el caso de «Chano»-, y contempla como agravante que el autor abuse «de su función o cargo, cuando fuere miembro integrante de las fuerzas de seguridad, policiales o del servicio penitenciario».
La imputación es transitoria y formal, porque todavía Amendolara no fue citado a declarar.
Amendolara designó como defensor a Fernando Soto, el mismo que abogado que representa a Luis Chocobar, el policía que le dio su apellido a la “doctrina Chocobar” del gatillo fácil y que este año fue condenado por exceso en legítima defensa al matar a un joven que escapaba luego de un robo en el barrio de La Boca.
El jueves, Chocobar se solidarizó con Amendolara y le ofreció su apoyo en una reunión realizada en el estudio del abogado Soto.
El abogado Soto confirmó que el próximo martes por la mañana se realizarán los peritajes al proyectil, la vaina y del arma reglamentaria con la que Amendolara realizó el disparo.
Todavía en terapia intensiva
En tanto, Moreno Charpentier continúa internado en el Sanatorio Otamendi, donde todavía los médicos evalúan la posibilidad de trasladarlo desde terapia intensiva a una sala común. “Le bajaron la sedación y está sin respirador”, informó esta mañana su madre, Marina Charpentier, quien añadió que «aún no saben si lo pasarán a sala común» porque se espera su evolución.