Se trata de Juan Ignacio López Montoiro, el subsecretario de Gestión Administrativa, que en enero, con la venia de su exjefe, se asignó “unidades retributivas” adicionales y superó los $5 millones; no fue el único caso.
Omar Yasin duró menos de 100 días al frente de la Secretaría de Trabajo dentro del megaministerio de Capital Humano. Fue responsabilizado por el presidente Javier Milei de cometer un “error” al poner en marcha un aumento del 48% en los sueldos de ministros y otros altos funcionarios.
Luego de la polémica por la suba, que comprendía también al sueldo del Presidente y disminuía la potencia del grito de gestión libertario –el ajuste sobre la política–, Yasin salió eyectado de Trabajo y, al tiempo, fue reemplazado por el Julio Cordero.
Antes de la controversia que derivó en su salida, Yasin le puso el gancho a otro llamativo aumento. En el mes de enero, el subsecretario de Gestión Administrativa del área de Trabajo, José Ignacio López Montoiro, a fuerza de miles de pequeños montos adicionales –las denominadas “unidades retributivas”– sumó dos millones y medio de pesos al sueldo que percibe. Un adicional de casi 2.500.000 pesos.
Cada una de estas “unidades”, que son complementos adicionales a los sueldos de los funcionarios públicos, equivale a casi 490 pesos según el último ajuste plasmado en el decreto 206/2024, el mismo que desató el escándalo que le valió la salida a Yasin y que lleva la firma del Presidente, la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, y el jefe de Gabinete, Nicolás Posse.
Según la nómina en la que se detalla la cantidad de “unidades retributivas” con las que cuenta cada empleado del área de Trabajo, la mayoría de los funcionarios de Trabajo contabiliza entre 20 y 500 de esos montos adicionales. López Montoiro, la cabeza de la parte administrativa, tuvo en el mes de enero 5000 “unidades retributivas”.
No fue, sin embargo, el único funcionario con un sobresueldo de esta magnitud. En el listado, que lleva la firma de Yasin, sobresale otra funcionaria con la misma cantidad de montos extras. Se trata de María Marcela Flores, la secretaría del exjefe del área, quien también contabilizó 5000 de estos montos extras en el primer mes del año, es decir, una suma adicional de 2.445.000 millones de pesos.
Según se pudo averiguar de fuentes del oficialismo, a López Montoiro se le solicitó la renuncia –la cual presentó la semana pasada– y no formará parte del nuevo armado a cargo de Cordero. Por su parte, María Marcela Flores, empleada hace nueve años, regresó “a sus funciones anteriores” con un sueldo “acorde” a su cargo. “Fue una avivada y se tomaron medidas. Ninguno de los dos sigue desempeñando funciones» , dijeron a este medio.