La vacunación contra el Virus del papiloma humano (VPH) es una de las herramientas que existen desde la salud pública para lograr evitar las infecciones que pueden generar cáncer.
Desde el Ministerio de Salud Pública de la Provincia convocan a niños y niñas nacidas en 2009 y 2010 a que se vacunen contra el Virus del Papiloma Humano (VPH).
Advirtieron que debido a la pandemia de coronavirus y a las medidas de prevención que se tomaron para evitar contagios, algunos chicos quedaron con esquemas incompletos y otros todavía no se aplicaron la primera dosis.
Desde el año 2011, se incorporó al Calendario Nacional de Vacunación la inmunización contra el VPH para las niñas de 11 años de edad. En el año 2017, se sumó a los varones de la misma edad.
El esquema para estas edades es de dos dosis y la aplicación es gratuita y obligatoria. Quienes formen parte de estos grupos deben acercarse a los servicios de salud para recibirlas.
Las personas con VIH o trasplantadas tienen la vacuna contra el VPH gratuita hasta los 26 años; en estos caso, son tres dosis.
La vacunación contra el VPH es una de las herramientas que existen desde la salud pública para lograr evitar las infecciones que pueden generar cáncer de cuello de útero, pero también cáncer de ano, pene y boca.
La jefa del Programa de Inmunizaciones de la Provincia, Adriana Jure, explicó que históricamente en Salta se vacuna a la cohorte entera a principios de año para que hasta junio todos tengan sus primeras dosis. Seis meses después se aplican las segundas dosis.
Tras las complicaciones derivadas de la pandemia, ahora se tratan de recuperar los esquemas que quedaron incompletos e inmunizar a quienes aún no recibieron ninguna dosis. La funcionaria aseguró que se puede recibir la segunda dosis después de los seis meses previstos como mínimo luego de la primera aplicación.
“Si hay mujeres nacidas en el año 2000 y no tienen su esquema de vacunación completo de VPH deberían completarlo aunque tengan hijos. Lo mismo, los varones nacidos a partir de 2006”, aclaró la experta.
Jure explicó que “la vacunación es una estrategia más que aporta a la disminución del cáncer de cuello de útero, que es el más frecuente”, aunque aclaró que el VPH está relacionado también con cáncer de ano, pene y boca.
“Es superimportante el Papanicolaou, el tratamiento precoz y la educación. Se necesitan las tres cosas para disminuir”, observó.
“El VPH es una infección cosmopolita, está en todo el mundo, y con toda la estrategia que se lleva adelante el impacto tiene que ser muy importante”, evaluó.