Se quedaron sin fiesta ya que, el 45% de los contagios en Río de Janeiro corresponden a la variante Delta.
Debido a una nueva ola de contagios por coronavirus con el correspondiente aumento de hospitalizaciones, el intendente de Río de Janeiro, Eduardo Paes, comunico ayer viernes la postergación del levantamiento de las restricciones y se disculpó por haber pasado un panorama optimista sobre la pandemia.
«Está claro que hay un nuevo aumento de casos, algo que no ocurría hace semanas. Cuando anunciamos una reapertura no quiso decir que la situación está controlada. Quizás comunicamos mal. Si pasé la impresión de que estaba todo bien, esa no fue la intención, no está todo bien, me equivoqué«, reconoció el alcalde, informó
Hace algunos días, Paes había anunciado que las medidas de restricción se levantarían el próximo 23 de agosto y se realizarían fiestas en las calles de la ciudad para conmemorar el hecho. Brasil se encuentra en una en una curva descendente desde fines de junio, tras el colapso hospitalario iniciado en marzo, siendo el país con más muertes por coronavirus en el mundo durante 2021.
De acuerdo a datos brindados por la Secretaría de Salud carioca, el 95% de los internados en la ciudad no recibió ni la primera dosis de la vacuna, a lo que hay que sumar los casos de síndrome gripal y respiratoria producto de la caída de temperaturas durante el mes de julio, en uno de los inviernos más rigurosos por lo menos desde 2013 en la región sudeste y sur de Brasil. El 45% de los contagios en Río de Janeiro corresponden a la variante Delta.
Río de Janeiro tiene acumulados 30.561 muertes y no registra decesos desde el martes. En la ciudad es obligatorio usar barbijo y respetar el distanciamiento social en casi todas las actividades económicas, culturales y deportivas y aforo del 40 por ciento, menos las discotecas y espacios de reuniones masivos, así como fiestas públicas y privadas.
Brasil reporta 560.706 muertos desde el inicio de la pandemia en el país con más de 20 millones de casos, pero la pandemia está en retroceso, con menos de 800 muertos promedio diarios, el mismo nivel que en enero de 2021, antes de la segunda gran ola con la variante Gamma o P1 surgida en el estado de Amazonas.