“La causa que puso el médico legal fue muerte súbita”, dijo el gerente del Hospital “San Roque” de Embarcación, Facundo Orozco al ser consultado. Añadió que “la nena estaba en bajo peso”.
Este domingo, apenas pasados sus dos años de vida, Griselda Tejerina Pérez falleció luego de un episodio de vómitos. Había cumplido años el 8 de mayo. La nena falleció en su casa, en jurisdicción del municipio de Embarcación, por lo que fue revisada por médicos forenses en el paraje Algarrobito, donde reside una de las comunidades indígenas que se asienta sobre la ruta nacional 81, en el límite entre los departamentos Rivadavia y San Martín.
“La causa que puso el médico legal fue muerte súbita”, dijo el gerente del Hospital “San Roque” de Embarcación, Facundo Orozco, al ser consultado. Añadió que “la nena estaba en bajo peso”.
Al consultar sobre los protocolos que se siguen cuando una criatura está en riesgo de bajo peso, Orozco reveló que “este mes no dimos leche”, al referirse a la falta de entrega del alimento.
La noticia fue corroborada por la gerenta del Hospital de Orán, Gladys Laime, quien ante las consultas de este medio respondió que no se enviaba más leche por una decisión del gobierno nacional. “Nosotros teníamos un stock y dimos prioridad a los pacientes de bajo peso”, dijo la responsable hospitalaria.
Fuentes del Hospital de Santa Victoria Este (municipio de Rivadavia, con la mayor cantidad de población originaria), indicaron que desde hace tres meses se dejó de entregar la leche que antes era destinada a todos los niños y niñas y las embarazadas.
“Acá, sin importar si el chico está con bajo peso o no, solo te daban la leche hasta que cumple un año”, contó una mamá de la zona que puso en aviso de esta muerte. Sostuvo que también se enteró ayer que el beneficio había sido suspendido.
Desde el Ministerio de Salud de la Nación se respondió que el dinero que se volcaba a la compra de la leche que se repartía en los centros de salud se incorporó en las asignación universal por hijo (AUH) y por embarazo (AUE).
El anuncio de este cambio de política se hizo el 7 de marzo pasado, entre el Ministerio de Salud de la Nación y la ANSeS. Los organismos indicaron que la decisión se tomó en el marco de la Ley 27.611 de Atención y Cuidado Integral de la Salud durante el Embarazo y la Primera Infancia, conocida como Ley 1000 días. La normativa “garantiza la provisión pública y gratuita de insumos fundamentales para personas gestantes durante el embarazo y para los niños y las niñas hasta los tres años que no posean cobertura por parte de obras sociales y empresas de medicina prepaga”, indica el comunicado oficial.
En aquel momento, la ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, detalló que “es un importe que se suma a la Asignación Universal por Hijo o por Embarazo para poder trabajar, en conjunto con ANSeS, específicamente en el tema leche a fin de favorecer la alimentación saludable” por lo que desde la Secretaría de Acceso a la Salud se trabajará “para que esos fondos a los que acceden directamente las familias puedan traducirse en mejor alimentación para niños y personas gestantes”.
La partida cuenta con una actualización trimestral y desde la cartera sanitaria se justificó que “existen diversas experiencias sanitarias de programas de transferencia monetaria que fomentan la corresponsabilidad de las familias perceptoras generando empoderamiento y autonomía, aumentando a su vez las posibilidades de los beneficiarios de elegir los alimentos a consumir”.