La Alcaldía de Río de Janeiro, capital turística de Brasil, anunció que se realizarán las tradicionales fogatas en la playa de Copacabana y otros puntos de la ciudad para recibir el Año Nuevo a pesar de la aparición de la cepa Omicron del coronavirus.
Las autoridades de la gobernación y la capital estadual acordaron realizar el evento pero sin los multitudinarios shows musicales que habitualmente se realizan en las playas.
«Estamos anunciando una versión más simple del Reveillon, vamos a tener el espectáculo de los fuegos que será visible desde diversos puntos de la ciudad , nuestro deseo es que no haya una gran concentración de gente en el Reveillon de Copacabana», dijo el alcalde Eduardo Paes.
La semana pasada Paes había anunciado la cancelación del Reveillon para impedir el contagio tras la aparición de la nueva variante, pero cambió de parecer luego de consultar al Comité Científico del coronavirus.
El Reveillon suele convocar a unos 2 millones de personas en Copacabana y otras playas cariocas.
Este año no estará permitido estacionar junto a la playa ni habrá transporte público a la madrugada como forma de desalentar la llegada del público.
Paes formuló declaraciones el jueves a la noche cuando admitió que, a pesar de las medidas previstas, «no tengo dudas que va a haber aglomeraciones en el Reveillon, preparen las máquinas fotográficas».