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Sociedad

Cuatro meses de la desaparición de Gastón Sanz

Su padre Andrés no baja los brazos y sigue la búsqueda de su hijo, que el pasado 1 de abril debería haber festejado sus 32 años junto a su familia.

Gastón estaba en la zona del río Castellanos el domingo 20 de febrero de este año y desde entonces nadie supo más nada de él. Durante semanas hubo una intensa búsqueda con especialistas, voluntarios, vecinos, baqueanos de la zona y autoridades policiales, pero con resultados negativos.

A días de cumplirse cuatro meses de su desaparición, sus padres no pierden las esperanzas. Andrés, su papá, dialogó con El Tribuno y habla de Gastón es tiempo presente, con todas sus fuerzas para saber si está en otro lado.

¿Usted sigue con la idea de que no hay que olvidarse de Gastón?

Sí, porque en estos momentos está así como olvidado. En el segundo mes de búsqueda los medios me llamaban, en el tercer mes nada. Yo le pedí al ministro (de Seguridad) Abel Cornejo que me ayude con la búsqueda y me prometió que sí, que iba a ir hasta las últimas consecuencias; que su prioridad era encontrarlo. Pero bueno, pasó mucho tiempo sin poder reunirme con él. Ayer (por el martes) fui a verla a Elena Cornejo, esposa del gobernador, quien me dijo que me daría una mano. Yo quiero aprovechar los medios de comunicación porque la gente escucha, que estén atentos por si ven alguna pista, algún indicio sobre Gastón. Yo sé que solo no voy a poder hacer nada y es por eso que necesito que la gente me dé una mano, porque hasta el día de hoy yo nunca tuve una pista, no tengo nada de nada.

Pero hubo mucha gente que estaba ayudando…

Todo de a poquito se fue desvaneciendo. Siempre estuvieron y estarán los amigos, mucha gente se acerca a darme ánimos, pero yo necesito que alguien lo busque. Alguna parte de la Policía o gente que esté destinada a la búsqueda en sectores en donde hay gente en situación de calle o donde yo no tengo acceso. Yo me imagino que de pronto él está ahí, en alguna casa, en algún lado. Yo necesito que alguien lo busque. O si alguien lo ve, o quizás si se fue a alguna otra provincia, yo lo que digo son puras suposiciones que parten sobre qué hubiera hecho yo. No sé para dónde disparar.

Los grupos voluntarios fueron muy valorados por usted…

La gente que estuvo al principio fue toda maravillosa. Los vecinos de Lesser me prestaron caballos. Se portaron muy bien conmigo y yo no tengo palabras más que de agradecimientos para con ellos. Los que se acercaron, muchos que no me conocían, estuvieron bien. Al no tener resultados nos quedamos sin lugares dónde buscar. El tema es si se fue del lugar en donde se perdió, cosa que yo creo puede haber sido así. Entonces puede estar en otra provincia, en otro lado, pero no tengo indicios de nada.

Usted tiene la esperanza de que no está en Lesser…

Esto es por ahí lo que uno quiere creer: que se haya ido a otro lado. Sabemos que mi hijo sufre de bipolaridad y por ahí siquiera ni sabe dónde está ni cómo se llama, ni si quiere volver a su casa. No sé nada. Es algo que tenemos en contra porque no está consciente de su realidad y por eso no quiere volver a su casa.

Hubo muchos grupos buscando y no hallaron nada…

En Lesser, vino gente desde Catamarca, del equipo especializado del Sistema Federal de Búsqueda de Personas Desaparecidas y Extraviadas (Sifebu), hubo baquianos, voluntarios, policías, todos sin novedad. Se hizo un rastrillaje con perros. Lo que quiero creer es que no está ahí. Es la ilusión de encontrarlo vivo, porque si es que está ahí ya no está con nosotros. Por eso mi ilusión es encontrarlo en otro lado. Acá su mamá lo está esperando en su casa, con su cuarto listo, con su trabajo. Si nos llega a escuchar o ver las noticias, que lo sepa.

¿Finalmente saldrá la recompensa?

También estamos pidiendo el tema de la recompensa, ya salió la resolución. Nación tiene que fijar el monto y estamos esperando que salga en cualquier momento. Eso nos podría dar una mano porque quizás haya gente que no se anima y esto nos puede dar la chance de hallarlo.

¿Cómo hace un papá para seguir?

A veces se hace muy complicado porque uno tiene que seguir viviendo y todos los días recordando que te falta tu hijo. Ahora que hace frío uno piensa que está pasando frío, hambre y todas las cosas que se le vienen a la cabeza.

¿Qué le pide a la comunidad?

Que por favor se animen a llegar a la Policía o medios si tienen alguna pista. O a mi teléfono, que hablen conmigo, porque estamos desesperados tratando de encontrarlo; porque lo seguimos buscando a pesar de no tener ningún indicio. Yo cuando estoy en mi casa pienso adónde voy a buscarlo, porque la verdad que no sé nada.

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